En Córdoba más de una institución está sufriendo un progresivo desgaste. A las denuncias por narcotráfico sobre la policía y políticos del PJ y la UCR se sumó la denuncia de fraude electoral contra el FIT, que mancha directamente a las grandes estructuras partidarias y hasta la propia Justicia Federal cordobesa.

Narcopolicía, narcopolítica
Por el escándalo de la “narcopolicía” ya hay ocho efectivos detenidos. Y siguen cayendo. Pero este escándalo se transformó en “narcopolítica” cuando salió a luz la intervención de dirigentes y punteros del PJ y la UCR, afectando la credibilidad de las principales estructuras políticas de la provincia. En la última semana se sumó la ministra de Seguridad Alejandra Monteoliva que dijo, insólitamente, que “en Córdoba no hay ningún narcoescándalo”.

Fraude y crisis en el régimen
El 27 de octubre se produjo el fraude contra el FIT1. Vale destacar que sólo el 50% de la población votó por la UCR y el PJ, golpeando fuertemente al bipartidismo provincial. Así, la muy buena elección de la izquierda se combina con un creciente declive de dos importantes pilares políticos del régimen.
Nuestra demanda de “¡Abran las urnas!” se hizo masiva en la población, abriendo una crisis política que golpea aún más al bipartidismo y la Justicia.
En la maniobra está implicada la UCR, beneficiada directa del fraude que, junto a Unión por Córdoba (PJ y aliados) y el Frente para la Victoria, guardaron un nervioso silencio (estos últimos también temerosos de perder su segunda banca).
Por su parte los tres jueces de la Junta Electoral, en un fallo dividido, resolvieron que no se abran las urnas generando un gran cuestionamiento. Así la Justicia respondió a la UCR y a UPC en un verdadero “pacto de Estado” contra el FIT. Los dos jueces que rechazaron la apertura de urnas son Bustos Fierro (célebre por habilitar la re-reelección de Menem) y García Alloco (cuestionado por incompatibilidad ya que es empresario sojero y juez).
El apoyo de amplios sectores al reclamo se expresa, por ejemplo, en el pronunciamiento favorable por parte de los reconocidos periodistas cordobeses. El FIT sigue llamando a la movilización. Para hoy jueves convocamos a concentrarnos en Colón y General Paz para decir “¡No al fraude. Abran las Urnas!”. Los principales dirigentes del FIT, Liliana Olivero, Hernán Puddu y Eduardo Salas presentarán la próxima semana las pruebas del fraude ante la Cámara Nacional Electoral en Buenos Aires. 

Desafíos de la izquierda
El desgaste de las instituciones del régimen no terminará cuando salga de la agenda mediática. Está instalado en la conciencia de amplias franjas de jóvenes y trabajadores. El masivo “que se abran las urnas” podría generar, por ejemplo, un mayor rechazo a los habituales fraudes de la burocracia sindical contra luchadores independientes.
El ánimo del movimiento obrero también está cambiando. Así lo demuestra la gran jornada de lucha que este miércoles protagonizaron los obreros de Volkswagen (ver pág.5). Y la toma de la autopartista Valeo también mostró un nuevo ánimo. Dos respuestas obreras, ocurridas con pocas horas de diferencia en un contexto en el que las empresas empiezan a ajustar con suspensiones y despidos impunes, sin que el Ministerio de Trabajo ni el SMATA de Dragún (pro empresario) digan algo.
Empieza a surgir en Córdoba la voluntad de ponerle freno a los atropellos de la Justicia, de los partidos patronales y de las empresas. Muchos sienten que los poderes “son todos lo mismo”. Eso puede abrir un diálogo a amplia escala de la izquierda con miles de jóvenes, trabajadores, docentes y todo el pueblo trabajador. El PTS lucha para que estas experiencias decanten en una fuerte corriente militante revolucionaria que extienda las ideas de la izquierda por abajo, transformándolas en organización. Conquistando delegados y comisiones internas en el camino de recuperar los sindicatos, junto a centros de estudiantes combativos y militantes. 

Joaquín Ramírez

1 El mecanismo del fraude ha sido explicado en LVO 545
2 Dragún fue ministro de Trabajo de De La Sota. Entre otros “desaciertos”, la lucha de Volkswagen fue un golpe duro que determinó su caída.