El 24 de junio se realizaron las elecciones en uno de los gremios más importantes de la provincia, que cuenta con casi 60.000 docentes. Con una participación cercana al 35% de los empadronados, que son sólo un 40% del total de los docentes (o sea una ínfima minoría) la burocracia Celeste se impuso con la mayor diferencia histórica (un 80%) sobre la oposición representada por dos listas: la Fucsia-Magenta y la Fucsia-Azul y Blanca.
Una vez más vemos hasta dónde es capaz de llegar la Celeste, para mantener sus sillones. Las elecciones fueron adelantadas sorpresivamente por la conducción, enfriando la lucha por aumento salarial, mientras prorrogan sin razón alguna la elección de delegados escolares. Pero este triunfo “histórico”, no expresa el real desprestigio de la burocracia en el gremio, cuestión que la oposición no supo organizar, ni expresar.

Los errores de la oposición

Hasta hace poco tiempo la lista Fucsia era única y estaba integrada por el MST, PO, Patria Libre y otros sectores. En el proceso de discusión hacia estas elecciones Patria Libre decidió irse.
Desde la agrupación D-Base, que impulsamos docentes del PTS y compañeros independientes, veníamos criticando la convivencia de la izquierda con una agrupación pro-gubernamental. Cuando PL se retira, propusimos convocar a plenarios abiertos a todos los docentes que quisieran luchar seriamente por arrancar al gremio de manos de la burocracia. Hubiera sido posible reunir a decenas de docentes y democráticamente, votar el programa y los candidatos de una lista opositora que recupere el gremio y cambie radicalmente a la U.E.P.C.
Lamentablemente los dirigentes de la FUCSIA rechazaron nuestra propuesta y realizaron un acuerdo con la lista AZUL Y BLANCA (de la “Corriente Clasista y Combativa”) que son parte de la directiva de SUTEBA junto a la Celeste de Yasky.
Las elecciones anteriores demostraron el enorme desprestigio hacia la conducción Celeste, donde la FUCSIA sacó en Córdoba Capital más del 40% de los votos, perdiendo por apenas 300. Junto a reiterados repudios de la base hacia Nebreda, esto abría una enorme posibilidad para agrupar a la oposición y proponerse recuperar nuestro gremio.
Pero los (malos) cálculos electoralistas del MST y PO, los llevaron a privilegiar un acuerdo con quienes son parte de la burocracia en SUTEBA.
Además de este error, permitieron pacíficamente, que su ex–aliado (Patria Libre) avalado por la junta electoral se presente con el mismo nombre (FUCSIA, pero Magenta), sin hacer una campaña seria de denuncia a este fraude de hecho, que le dividió los votos, todo por mantenerse dentro de la “legalidad” del proceso electoral. Con aliados tan respetuosos de los “cuerpos orgánicos” como es la Azul y Blanca, no nos extraña que hayan cedido tan escandalosamente a la burocracia en este punto.
Pese a que la burocracia sale fortalecida de esta elección, no expresa la realidad del gremio, llamamos a los compañeros de la Fucsia a sacar conclusiones de este proceso y organizar una oposición verdaderamente antiburocrática, para que la Celeste no traicione la lucha en curso por aumento salarial.