por Carla Lacorte, víctima del gatillo fácil e integrante del CeProDH

La semana pasada nos notificaron que el Tribunal Oral N°5 de Quilmes será el encargado de establecer los años de condena que le corresponden al policía José Salmo. De esta manera, después de casi nueve años de lucha, el bonaerense que me disparó y me dejó en una silla de ruedas podría ir preso.
Este es un paso más que damos en la lucha contra la impunidad luego de lograr que la Cámara de Casación de La Plata revirtiera el fallo de primera instancia de los tribunales de Quilmes que absolvieron a Salmo de culpa y cargo alegando “cumplimiento del deber”, la forma en que la justicia a favor de los poderosos denomina al gatillo fácil.

Ninguno de los avances que tuvimos fueron por la bondad o el “buen criterio” de los funcionarios judiciales o del Estado sino por permanecer movilizados, denunciando permanentemente las prácticas represivas de estos asesinos con uniforme que cada 28 horas asesinan a un joven. Esta lucha no la dimos solos sino en forma mancomunada con otros familiares de víctimas de la brutalidad policial, los organismos de derechos humanos y organizaciones obreras y estudiantiles. Por eso el viernes pasado, cuando hicimos la conferencia de prensa en la que informamos las novedades de la causa estuvieron Eugenia, hermana de Andrea Viera, Liliana, madre de Damián Rosende, Linda, madre de Mariano Vázquez, Diana, Martín y Adriana del Centro de Bellas Artes, Patricio del Normal, entre otros, como una pequeña muestra de lo que fuimos logrando en común y de la necesidad de enfrentar unidos el flagelo de la represión que sigue siendo moneda corriente contra los pibes de los barrios y que se cierne sobre los trabajadores y el pueblo cada vez que salen a reclamar por sus derechos.

En la conferencia también denunciamos que Salmo sigue libre y se puede escapar, como sucedió en reiteradas oportunidades con otros asesinos de gatillo fácil. Por eso salimos a reclamar que vaya preso ya y tenga una condena de cárcel común y efectiva. En ese sentido decidimos lanzar una campaña por castigo efectivo contra Salmo y todos los asesinos de gatillo fácil, que comenzará con una megapegatina de carteles en toda la zona sur durante esta semana.