Vilca, indicó que “se trata de una reforma hecha a medida del Gobernador con la cual busca habilitar un nuevo mandato, una re reelección. Además que en los puntos a modificar, se plantea reforzar distintos mecanismos que ya funcionan para limitar el derecho a la protesta social. Y se agregan puntos que ya existen en la Constitución actual y que el gobierno no respeta como por ejemplo, los derechos de niños y adolescentes en una provincia que por la pobreza hay trabajo infantil o las patronales tienen vía libre para tener a 9 de cada 10 jóvenes trabajando en negro.”

Además agregó, “mañana finalmente la Legislatura va a tratar la reforma que quiere el Gobernador. Para que se apruebe le falta un voto, ahí veremos cómo desde el peronismo lo ayudan para tener ese voto que les hace falta, aunque después digan que se oponen a la reforma. Nuestra postura es clara, rechazamos esta reforma y exigimos a los gremios un paro provincial para frenarlos y defender los derechos del pueblo trabajador.”

Para la izquierda, está todo arreglado entre el oficialismo y sus socios. Además advierten que para la elección de constituyentes que seguramente sea en diciembre durante el mundial de fútbol, rige el piso electoral del 5% que es utilizado para dejar afuera a las fuerzas de trabajadores. Siendo una elección sin pauta gratuita y con los partidos tradicionales controlando a los principales medios de comunicación.

Por su parte, el concejal, Gastón Remy, destacó “nuestro rechazo a la reforma del Gobernador va de la mano de plantear la necesidad del derecho a que el pueblo trabajador cuente con una asamblea verdaderamente democrática donde pueda discutir todos sus problemas. Sabemos que el oficialismo ni sus socios la van a dar. Por eso, hay que pelear con la fuerza de la clase trabajadora organizada en las calles, uniendo ocupados y desocupados.”

Se trata de preparar una pelea de fondo para terminar con la Jujuy de los poderosos y que las riquezas sean controladas por quienes las producen, los propios trabajadores y trabajadoras. “Un ejemplo lo tenemos en La Esperanza donde el Estado se quedó con 30 mil hectáreas del ingenio y podrían hoy estar generando actividades productivas para terminar con el desempleo en la región. Sin embargo, esto no sucede por decisión política del gobierno, a la vez, que el Gobernador premia a los empresarios quitándole por diez años el pago de impuestos como le dio al ingenio. Son estos temas los que hay que pelear cuando decimos conquistar una asamblea constituyente verdaderamente democrática, como parte de una pelea de fondo para dar vuelta está historia de una provincia rica, pero por decisión del poder político y los grandes empresarios, la mayoría de los trabajadores son pobres.”