¿Cómo falleció el compañero Daniel Ayala?

Trabajador contratado: La muerte de Daniel, un crimen y no un accidente como quieren hacerlo pasar los directivos del teatro (Pedro García Caffi, director general y López Castro, a cargo de la tercerización) ocurrió cuando al intentar usar el montacargas con materiales pesados de limpieza en la oscuridad, detrás del escenario y sin que exista baranda ni señalización de ningún tipo, Daniel cayó 14 metros por el hueco abierto, hasta el sótano. Todo el mundo en el teatro sabe que así no se puede usar el montacargas, que no tiene seguridad, pero a las autoridades no les importa nada. El resto de los trabajadores nos enteramos dos horas después ya que el directorio y los delegados del Sutecba no quería decir nada, solo había un rumor de que había ocurrido un accidente. Ante semejante ocultamiento adrede, con el rumor se dio una reacción en cadena donde todos estábamos indignados. Ahí empezamos a copar el escenario y a pedir que se deje de trabajar y un Compañero efectivo y viejo activista, salio a los gritos a parar el ensayo y se dio una asamblea espontánea. Recién ahí los delegados del Sutecba aparecieron a dar explicaciones y luego Caffi haciéndose el dice que Daniel no era un trabajador de la casa, por eso la demora en conocer los hechos realmente... Todos estallamos de bronca y le gritamos que se vaya y renuncie.

¿Cómo fue la respuesta de los trabajadores?

TC: Al suspenderse el ensayo y estando más de 300 trabajadores en asamblea, se expresaron infinidad de reclamos que se vienen planteando desde hace años en relación a la inseguridad en la que trabajamos, la condiciones de precariedad que padecemos los contratados y los tercerizados. Que una cosa es del telón para afuera y si se hubiera caído un ascensor donde estuviese un renombrado abonado como Bunge, el teatro se clausura un mes, pero sin embargo del telón para adentro, como se murió un compañero de limpieza, no pasa nada, todo debe seguir funcionando, somos un número que se reemplaza fácilmente. Nos quieren hacer creer que somos una elite laboral por estar en el Colón, pero es una farsa. Los delegados del SUTECBA no se la llevaron de arriba, por ser cómplices directos de las autoridades se llevaron varios insultos, y los delegados de ATE lamentablemente no hablaron en las asambleas.

Al día siguiente, sábado, más de 300 trabajadores nuevamente se convocaron a la asamblea y se convirtió en un paro de hecho, a pesar de que los de SUTECBA volvieron a negarse a convocarla. Más de 30 se anotaron para hablar, diversos reclamos se exigían y se pedía que renuncien Caffi y todos los responsables, que se ponga en pie una comisión de seguridad e higiene integrada por trabajadores, y que se acabe con la precarización y la tercerización. La muerte de Daniel no puede quedar impune. Terminamos haciendo un acta de reclamos a las autoridades, y la respuesta de Caffi fue la amenaza de levantar la temporada, e incluso que se caigan contratos. Una vez más quieren aplicar el terror a perder el trabajo para dejar impune la muerte de Daniel.

R. Traibel: No sólo en el Colón respondieron los trabajadores, en la Dirección de Música convocamos a una asamblea a los no afiliados y afiliados a ATE o SUTECBA y con rapidez respondieron los trabajadores, dando por hecho el paro si los del Colón lo convocaban, siendo respetuosos de las decisiones de los compañeros afectados directamente. Conociendo como trabajamos no teníamos duda que no fue un accidente sino un crimen por desidia de los directivos. Sacamos un comunicado urgente y nos contactamos con los compañeros del Colón para ponernos a disposición, ya que ese día a la noche nosotros teníamos función en el Parque Centenario y estábamos dispuestos a pararla.

¿Cómo sigue esta lucha?

TC: En el teatro prima el miedo por las persecuciones y el SUTECBA es cómplice por completo. Pusieron seguridad privada nueva por todo el teatro, además de las cámaras de seguridad que ya había. Deberemos ver cómo lograr que las asambleas continúen y ver cómo empezar a organizarnos por abajo.

RCT: Desde ATE se podría organizar toda esta indignación y encausarla a seguir la lucha hasta conquistar todas las demandas. Lo que quedó claro es que las diferencias entre los trabajadores no afiliados y afiliados a ATE o SUTECBA no pueden impedir dar una pelea juntos en asambleas resolutivas, única forma de que los trabajadores tengan fuerza suficiente. La solidaridad externa tiene que acompañar y ayudar a esta perspectiva. Para ello nos ponemos a disposición todos los compañeros de la Agrupación Marrón Clasista.