Con una serie de incidentes protagonizados por un grupo de manifestantes, se cumplió ayer la segunda marcha en contra de los aumentos de las tarifas de agua y luz. La manifestación estuvo encabezada por dirigentes y activistas del Partido Obrero, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), la CTA, el Partido Comunista Revolucionario (PCR), Izquierda Unida (IU), APSADES (Asociación de profesionales de la Salud de Salta), ADIUNSA (que agrupa a docentes universitarios), legisladores provinciales como Fabian Vittar del PRS, Claudio del Plá y Pablo López del PO, el concejal Víctor Manuel López del PRS, el conductor radial Sergio Poma, Leonardo Juarez del Partido Comunista, el representante de los trabajadores de televisión, Rodolfo Zacarías, Julio Reifemberg, desocupado, y Vuenaventura David, secretario de la CTA.

La convocatoria tuvo lugar a las 11 en la plaza 9 de Julio. Desde allí, la columna marchó por calle España hasta la esquina de 20 de Febrero. En ese lugar la policía había instalado un vallado de contención para evitar que los manifestantes llegaran a las oficinas de Aguas de Salta. Según informaron las autoridades policiales, "sabíamos que algunos "infiltrados"" en la marcha intentarían ingresar a la sede de Aguas de Salta, por lo cual "redoblamos la presencia de efectivos".

Al llegar al lugar del vallado, un grupo liderado por los diputados del PO, del Plá y López, avanzó contra el cordón policial tratando de romperlo, mientras desde atrás se arrojaban piedras y palos a los efectivos. .
Con la presión ejercida, los manifestantes lograron romper el primer cordón policial. En ese momento, miembros de la Infantería comenzaron a reprimir utilizando gases lacrimógenos, tras lo cual los manifestantes se dispersaron sin lograr el objetivo de llegar al edificio de Aguas de Salta.

La policía

Luego de la dispersión de los manifestantes, el jefe del operativo policial, comisario Amado Gaspara, dijo que``Algunas personas nos pedían el paso para dialogar con los responsables de la empresa, pero tenían palos en la mano" . Además -indicaron- "hubo intencionalidad en la forma de desplegar las columnas, ya que mientras algunos marchaban por la calle España, otros lo hacían por 25 de Mayo, con la clara intención de tomar las oficinas de Aguas de Salta"".

Luego de los incidentes, los manifestantes se reagruparon nuevamente frente a la plaza 9 de Julio, donde llevaron a cabo un acto en el que simbólicamente quemaron una reproducción gigante de una factura de agua y luz y dieron a conocer un documento que fue leído por el vecino de barrio Grand Bourg, Carlos María Pagano Fernández. Allí expresaron su desacuerdo por la falta de respuestas a los reclamos efectuados en la marcha anterior del 26 de agosto y reiteraron su pedido para el cese de la concesión y la reestatización del servicio de agua. ``El agua de Salta, para el pueblo de Salta"", exclamaron.

Dos recursos de amparo

Dos recursos de amparo contra los aumentos de agua y de luz se presentaron ayer en la Justicia por parte del Comité del Consumidor (CODELCO).
Los recursos llegaron junto a una medida cautelar para tratar de frenar los incrementos en los servicios hasta que el juez determine los pasos a seguir.
Los abogados de CODELCO presentaron los pedidos en el juzgado de séptima nominación en lo Civil y Comercial, a cargo de Beatriz del Olmo de Perdiguero.

Indicaron que el organismo está legitimado a operar en defensa de los usuarios. ``No estamos objetando la colocación de los medidores, ni siquiera el aumento de la luz y el agua, dijo Guillermo Durand Cornejo, pero es necesario que se cumpla con las leyes y que se sigan los pasos legales, respetando a los usuarios en la convocatoria a las audiencias públicas y en la información sobre la renegociación de los contratos"".

Tres policías heridos

No se registraron detenidos durante los incidentes de ayer entre los manifestantes y la policía, aunque sí hubo heridos entre los integrantes de la fuerza del orden.
El comisario Rubén Arzelán, jefe de la Unidad Regional, confirmó que tres efectivos resultaron con lesiones y uno tuvo que ser internado en un sanatorio como consecuencia de un golpe que recibió en la cabeza, cuando uno de los manifestantes arrojó una piedra.

Los otros fueron auxiliados por sus compañeros y tenían traumatismos provocados por las bases de metal de las vallas que fueron sustraídas y utilizadas contra los efectivos. Al final de los incidentes estas estructuras habían desaparecido por completo.

Por el lado de los manifestantes no hubo que lamentar lesiones, sólo el efecto de los gases lacrimógenos que lograron dispersar a las columnas y que provocaron que transeúntes ocasionales y periodistas que cubrían la marcha resultaran momentáneamente afectados.