La coordinación implica un paso más que el frente único, por ejemplo para marchar en común, implica ponerse de acuerdo en una serie de puntos.
No se trata de hacer una corriente sindical y después decimos “partido de trabajadores” y con eso somos clasistas. Una corriente clasista amerita una práctica todos los días, que no es sólo la democracia sindical. Hay compañeros que hacen asambleas todos los días pero después aportan a proyectos políticos ajenos a los trabajadores.

Por eso nosotros nos tomamos el atrevimiento de tomar mucho de lo que es el estatuto del Sindicato Ceramista. No es porque descubriéramos los ceramistas el clasismo, sino que tomamos los mejores ejemplos y tradiciones que compañeros que dieron la vida, tomándolo críticamente.