El flamante jefe de gabinete ocupó diferentes cargos desde fines de los 80, entre ellos varios dentro de la Secretaría de Desarrollo Social de la Nación durante el menemismo. Hizo una carrera ascendente, en medio de la cual quedaron varios hechos de corrupción que lo implican, como el proceso de privatización del Banco de Formosa mientras era asesor de esa provincia. Durante diciembre de 2001 se desempeñó como ministro en el fugaz paso del misionero Ramón Puerta por la presidencia, y al año siguiente asumió como Jefe de Gabinete de Duhalde, siendo uno de impulsores de las medidas económicas que buscaron en ese momento beneficiar a las grandes empresas, ante la crisis abierta. Senador nacional hasta 2007, ese año asume como gobernador de Chaco. Fue un férreo defensor de los empresarios, poniendo la policía provincial al servicio de los terratenientes que usurpan las tierras ancestrales del pueblo Qom. Además de reprimirlos, permitió que se cometan contra ellos los crímenes más aberrantes. Pero la represión no fue sólo para los pueblos originarios, sino contra los piqueteros y docentes de la provincia. Cercano al Opus Dei, “en nombre de Dios” se opuso al matrimonio igualitario y al derecho al aborto. Chaco le “debe”, además, el intento de instalación de una base del Comando Sur de las FF.AA. yanquis en su territorio.