Esta gran huelga resistió duros ataques de la patronal, derrotó el lock out de Telefónica que después, mediante fuerzas parapoliciales, atacó a los trabajadores con la complicidad del gobierno que liberó las zonas. Estos métodos son los mismos que utilizaron contra los trabajadores del Hospital Francés. El paro se unificó entre Telefónica y Telecom llegando a un 90 % de acatamiento e inclusive había sido lanzado un paro nacional de la Federación Nacional de Telefónicos (FATEL).
Sin embargo, el sábado 28 de octubre, ante un plenario de delegados sin mandato, la directiva de FOETRA comienza a dividir la lucha planteando que se levanta la huelga en Telecom ante un acuerdo de la empresa que no llega a las expectativas por las cuales peleábamos codo a codo efectivos y contratistas. Esta moción fue votada en forma burocrática y sin consultar a los trabajadores contratistas y efectivos.
El martes 31 se cerró el acuerdo con Telefónica que es muy similar al de Telecom. Plantea que la empresa se compromete a discutir un convenio telefónico para los contratistas de aquí a 12 meses (14 en el caso de Telecom). Mientras tanto seguirán en el convenio de la UOCRA, con un aumento de $140 al básico, con lo cual terminarían obteniendo un salario equivalente a la categoría más baja de FOETRA, pese a que los compañeros tienen 15 años de trabajo para las telefónicas.
En cuanto a los días caídos sólo se cubren un 65% para los efectivos y nada para los contratistas. Para oponerse al fondo de lucha, el secretario adjunto Claudio Marín (CTA - MIC) decía que la patronal pagaría los días caídos. Pero no fue esto lo que firmó él junto a toda la directiva, incluido el PO. El sindicato debería hacerse cargo. El último balance del FOETRA tiene un superávit de 4.200.000 pesos. Y para colmo, con el reciente acuerdo recibirá más de 40.000 pesos por mes como extra para “cursos de capacitación”de los tercerizados. Plata hay. 
 
Qué refleja esta lucha
Este reclamo histórico de los compañeros de las contratistas viene desde la época de la privatización en donde se dividió a los trabajadores.
Ante la expansión de las telefónicas este sector de trabajadores fue tomando más fuerza. Esto generó que un sector importante de contratistas comenzara a organizarse. La gran marcha del 12 de abril al Ministerio de Trabajo, sorprendió a toda la directiva de FOETRA que de ahí en más debió tomar la problemática de los contratistas, aunque a veces con actitudes repudiables como la circular que sacaron donde llamaba a no dejar entrar a los contratistas a los edificios. Desde sus inicios la dirección se vio forzada a encabezar esta lucha. 
El pase a convenio de los tercerizados cuestiona de lleno toda la reforma laboral de los ’90, la ley Banelco y su sucesora, y toda legislación flexibizadora. Por eso la inflexibilidad patronal y la actitud del gobierno que fue distinta a la lucha salarial de fin del 2004. Esta vez, apretó para que se levantaran los paros y tomas, a lo que accedió la dirección de FOETRA. Es que por lo avanzado del reclamo y la dureza del conflicto, la lucha exigía superar la visión corporativa y convertir al paro telefónico en una causa nacional contra la precarización y los pulpos imperialistas que lucran con la comunicación. Empezando por extender el paro a nivel nacional, llamar a coordinar y a las más amplia solidaridad obrera y popular, reclamar el apoyo concreto a la CGT y la CTA. Nada de esto se hizo.
La lucha por el convenio sigue y ahora será parte del conjunto de los telefónicos efectivos, contratistas y Atento, que quedó fuera del acuerdo con Telefónica. Hoy hemos conseguido abrir la perspectiva de discutir un convenio en común. En el 2007 comenzarán a preparase las próximas batallas. ¿Qué hacer? La clave será aprovechar este tiempo (que la patronal aprovechará al máximo) para soldar la unidad y organizarnos. Hay que profundizar, por lo tanto, la unidad que empezamos a forjar en la lucha. Ahora los contratistas pueden afiliarse a FOETRA y deberían elegir delegados. 
Esta lucha dejó al descubierto los límites de la dirección burocrática de FOETRA Bs. As., hegemonizada por el moyanismo y seguida por la CTA, a la cual se adapta acríticamente el PO, que la integra. Mientras algunos de sus delegados votaron en contra, los principales referentes de PO que están en la dirección de FOETRA avalaron el acuerdo. El PO debe romper públicamente su alianza con los sectores burocráticos de FOETRA que firmaron a espaldas de los trabajadores. 
La agrupación Violeta demostró ser la única oposición consecuente a la dirección reformista del sindicato. Desde siempre peleamos contra la tercerización y ayudamos a organizarse a los contratistas, como antes hicimos con los pasantes, los de Atento, etc. 
Con la autoridad de haber estado siempre al frente del reclamo de los sectores mas explotados de nuestro gremio, es que vemos hoy la necesidad de que se conforme una clara alternativa clasista en telefónicos, es decir antipatronal, antiburocrática e independiente del gobierno, que supere a las distintas alas burocráticas que dirigen nuestro gremio.