por PTS Villa Constitución-San Nicolás

La autopartista Paraná Metal hoy no está produciendo. El inversionista Cristóbal López, amigo de los Kirchner, abandonó la fábrica y ahora puede decretarse la quiebra.

Ante este peligro, se autoconvocaron unos 100 obreros en la puerta de la fábrica exigiendo la presencia de la Directiva y pidiendo que se realizara urgente una asamblea con todos los compañeros. El viernes 6 se realizó una masiva asamblea de 500 obreros. Si bien la Directiva la convocó como “informativa”, y sólo llevaba la propuesta de un Congreso de Delegados, pidió la palabra un trabajador de base, llamó a los trabajadores de Acindar a solidarizarse y propuso paro y movilización de toda la seccional. Esta moción fue apoyada por Lucho Molina, delegado de base de mantenimiento de Acindar, quien llamó a hacer votar en su fábrica la moción de paro.

El PTS en declaraciones previas venía planteando la necesidad de retomar la lucha. Los directivos de la UOM siguieron apostando a las negociaciones con el gobierno y confiar en López, que venía estirando las cosas, atacando conquistas obreras y suspendiendo ante la pasividad del sindicato. En un nuevo volante masivo planteamos el apoyo a la medida y por un corte de autopista para hacer sentir en Buenos Aires y el país el reclamo obrero.

En cientos de carteles del PTS que recorren Villa Constitución convocábamos a retomar la lucha, planteando como salida la expropiación y estatización de la fábrica pero bajo gestión obrera.

El Congreso de Delegados

En el Congreso abierto del martes 10 participaron unas 300 personas, obreros y delegados de Acindar y PM, directivos de Amsafe (docentes), ATE, y los estudiantes de los Centros del Terciario de Villa y de Arte de San Nicolás, que habían publicado su solidaridad a las medidas de lucha en el diario local y en volantes.

Fueron pocos los delegados de base de Acindar que realizaron asambleas en sus sectores.

La Interna de Acindar, dirigida por el paulonismo, no llamó a los delegados ni a la base a solidarizarse con el paro activo, pregonando así la división entre los trabajadores. Incluso después de votado el paro en el Congreso de delegados sólo quiere parar un sector. Esto es nefasto, ya que el cierre de Paraná Metal significaría la pérdida de más de 1000 puestos de trabajo.

Varias intervenciones propusieron paro, movilización e incluso el corte de autopista y que el Estado debía hacerse cargo de la empresa. El debate eran las medidas de lucha y la salida de fondo. Dos o tres delegados reclamaron que el gobierno debía dejar de permitir tanta importación y tenía que desarrollar el mercado interno, en clara alusión a favorecer a la patronal nacional. En oposición, un compañero de Acindar llamó al paro, movilización y corte de autopista, y que los bolsones de comida no son solución, contra la promesa del senador K, Agustín Rossi, quien había estado en la UOM Villa en plena campaña electoral.

Delegados de Acindar, de mantenimiento y acería, trajeron la votación de sus sectores en apoyo al mandato de la asamblea de Paraná Metal: paro y movilización, en un ejemplo de solidaridad de clase. Lucho Molina, de mantenimiento, planteó que si bien el Estado debía hacerse cargo, la fábrica tenía que estar bajo la gestión de los trabajadores y no de algún inversionista subsidiado. Denunció al mismo tiempo que el gremio tiene dos sectores: uno que está con el gobierno (Paulón) y otro con la oposición patronal y el campo (Piccinini). Que hay que tener una política independiente de ambos y exigirle a la UOM nacional que tome medidas de lucha. Y que además de un paro necesitamos un plan de lucha.

Chiche Hernández, delegado de base de Siderar y dirigente obrero de PTS, explicó la necesidad de que el Estado expropie sin indemnización la fábrica para ponerla a producir bajo gestión obrera, y que Zanón era un buen ejemplo a tomar, y que siguen peleando por la estatización.

Proponer una simple cooperativa no es suficiente, ya que se necesitan inversiones millonarias y hay enormes deudas dejadas por los dueños, además de que se expone a la dura competencia del mercado. El compañero de Paraná Metal que propuso por primera vez paro, explicó que los trabajadores no queremos agachar más la cabeza porque sino vuelve el látigo y la esclavitud.
Finalmente se votó una lucha escalonada, empezando por paro y movilización para el próximo miércoles 18 a la plaza central. La propuesta de cortar, además, la autopista perdió por poco margen pese a que el conjunto de la Directiva del sindicato e internas votó en contra. Pero no está descartada. Esta lucha recién se reinicia.