Luego del paro de una hora llamado por la dirección del STIA la semana pasada, se hicieron asambleas en las principales fábricas de la Alimentación.
Las críticas por lo tibia que son las medidas de Daer para imponerle las demandas obreras a las empresas, hizo que se propusieran acciones para continuar la lucha, independientemente de las “iniciativas” de la verde oficialista. Primero fueron los trabajadores de PepsiCo y Stani quienes resolvieron impulsar una marcha al Ministerio de Trabajo para el miércoles 7 ya que había “saltado” que las empresas y el Sindicato iban a reunirse allí en una audiencia que no fue informada a los trabajadores. Finalmente el lunes 5 se hicieron asambleas resolutivas en todos los turnos de Kraft y se votó participar de la movilización. Fueron 200 trabajadores de las tres fábricas, acompañados por estudiantes y delegaciones de partidos de izquierda que apoyan a los trabajadores combativos de la Alimentación, quienes nuevamente mantuvieron cortada la Av Callao por dos horas. Allí se planteó la pelea por un salario igual a la canasta familiar, por la reincorporación de los despedidos de Kraft y por el fin de los juicios de desafuero a los miembros de la Interna anterior de Kraft y a Javier Poke Hermosilla.

Mientras esto sucedía, Daer organizaba un Plenario relámpago con el objetivo central de boicotear la movilización. El Secretario General del Sindicato que debería estar presionando a las empresas quiso bombear la única medida que estaba dispuesta por los trabajadores en asamblea para pelear contra las patronales. En el Plenario “resolvieron” convocar a un paro, esta vez de dos horas por turno para este viernes y a una movilización para el miércoles de la semana próxima, en rechazo a una supuesta propuesta patronal del 23% en cuotas. Nuevamente son medidas insuficientes que se resuelven sin la menor consulta a la base. El jueves los trabajadores de toda la Alimentación, se enterarán que al día siguiente hay un paro, sin haber podido debatir sobre la medida que ellos llevan adelante y con la que se pelea por el bolsillo de miles. Está planteado igualmente garantizar un paro masivo y contundente para que se exprese la voluntad de conseguir un aumento por parte de los trabajadores y la exigencia de que el STIA convoque a un plan de lucha en serio, discutido democráticamente en asambleas en las fábricas. Los trabajadores de las tres grandes fábricas desconfían con justa razón de la dirección del Sindicato que tiene toda una historia de entregas de conquistas y por eso votaron exigir paritarios votados en asambleas y veedores en el caso de Stani para que “los de siempre” no negocien “cualquier cosa”.

La lucha que están dando las fábricas es un hecho inédito en el gremio donde por primera vez Daer no puede sentarse tranquilo a negociar. Sobre ese rechazo a la burocracia crece la movilización de los trabajadores y una corriente de oposición extendida y fuerte.

La lucha por el 35% y un salario igual a la canasta familiar es solo el inicio de una pelea que ahora se da en las paritarias pero va a continuar. Es nece sario organizar a cientos de trabajadores de la Alimentación para acabar con las conquistas patronales conseguidas en los 90 por la que los trabajadores pasan 6 días por semana en las fabricas, como es el caso de Kraft, con salarios que los obligan a las horas extras para poder sobrevivir, mientras las empresas se hacen cada vez más millonarias. En estos días habrá más novedades de la pelea de los trabajadores de la Alimentación a quienes veremos nuevamente en la calle.