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MOVIMIENTO OBRERO

La paritaria de la UOM: un acto de campaña kirchnerista para la CGT

Las paritarias de la UOM, más que defender los intereses de los metalúrgicos, se transformaron en el trampolín para que el candidato del gobierno, Caló, se quede con la conducción de la CGT.

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10 de mayo 2012

La paritaria de la UOM: un acto de campaña kirchnerista para la CGT

Las paritarias de la UOM, más que defender los intereses de los metalúrgicos, se transformaron en el trampolín para que el candidato del gobierno, Caló, se quede con la conducción de la CGT. Es que el gobierno y las patronales quieren en la conducción de la Central a alguien más oficialista y chupamedias que Moyano, que pueda ponerle fin a los reclamos obreros.
 
Para tratar de aparecer como combativos, la semana pasada, la directiva nacional encabezada por Caló, Naldo Brunelli y los caciques regionales, armaron una puesta en escena en la portería de Siderar, del grupo Techint en San Nicolás. Juntaron unos figurones, tiraron un par de bombas de estruendo y anunciaron que no iban a permitir que Techint negrease a los laburantes. Esta medida que no consultaron con nadie, en vez de defender nuestros intereses, fue el acto de campaña de Caló como candidato del gobierno para la CGT.
 
El paro anunciado para este jueves 10 es una tomadura de pelo para los metalúrgicos. No paramos para acabar con las condiciones de super explotación que reinan en nuestras fábricas, sino para tratar de mostrar a Caló como “independiente” del gobierno. El reclamo que lleva la UOM a las negociaciones es de un miserable 22%; un 15 % desde abril y un 7% en agosto, llevando el básico de convenio a unos $4000. Lo único que está trabado, es la puesta en blanco de $300 no remunerativos que venimos cobrando en enero, febrero y marzo. Techint, la empresa que dirige Siderar, es la principal empresa que se opone, mientras mantiene a compañeros contratados por $3500 al mes y en la que los trabajadores afiliados a UOCRA vienen reclamando con paros el pago de $17 la hora de un oficial.
 
Pero lo peor es que en Siderar no paramos. Sólo se hará una medida simbólica en la que no concurre a trabajar administración, algunos talleres y laminación, que ya viene con poca producción y encima tienen que devolver las horas.
 
Los trabajadores sólo podemos confiar en nuestras propias fuerzas. Tenemos que poder votar en asambleas en los sectores un plan de lucha serio para arrancarle a la patronal un salario básico de $6000 para todos y la derogación de la ley del impuesto a las ganancias. Necesitamos paritarios elegidos en asamblea y un congreso abierto de delegados de base para votar un paro nacional de verdad y un plan de lucha que una los reclamos de todos los trabajadores, partiendo del pase a planta de los contratados, en negro, pasantes y agencia.

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