La semana pasada cuando se dio a conocer que habían cerrado el acuerdo por el aumento salarial, con mis compañeros charlábamos, en broma pero sabiendo que los dirigentes nos vienen cagando hace tiempo, qué seguramente se arregló por menos de lo que se había pactado porque son unos pecho frío. ¡Y fue así!

Al otro día la bronca de la gente se expresó tirándole “palos” a los delegados que encima negaban saber el monto por el cual se firmó. Les recordamos las corridas a Varas (Secretario General) durante la marcha, y cómo se cagaron después para tomar medidas más profundas. En fin, nos sentimos defraudados por el sindicato nuevamente como parece que es costumbre. (...) El ambiente es de desgano, un compañero comentaba: como se nota que estamos bajoneados, no hay ganas de trabajar, (…) me da vergüenza cuando estoy con amigos del barrio y escucho decir que uno gana 2.600, otro 3.000 y yo apenas 1.600…”.

En definitiva hay mucha bronca que se mezcla con resignación aunque al mismo tiempo se dice:“ojala suceda otra marcha con todos los negros para desquitarse con estos dirigentes vendidos”... No queda otra.

L. trabajador
UOM Cba.