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Ciudad de Buenos Aires

¡El apoyo que crece entre los docentes!

Dos días después de la jornada nacional de lucha por Lear, volvimos al acampe en la puerta de la fábrica a continuar con el apoyo a l@s compañer@s. El ruido de la interminable balacera de la gendarmería y la represión, a los docentes no nos amedrentó sino que profundizamos la campaña sumando a decenas de compañeras y compañeros más, que repudiaron el accionar del Gobierno y la Gendarmería. El apoyo crece.

PTS Ciudad de Buenos Aires

15 de julio 2014

¡el apoyo que crece entre los docentes!

Dos días después de la jornada nacional de lucha por Lear, volvimos al acampe en la puerta de la fábrica a continuar con el apoyo a l@s compañer@s. El ruido de la interminable balacera de la gendarmería y la represión, a los docentes no nos amedrentó sino que profundizamos la campaña sumando a decenas de compañeras y compañeros más, que repudiaron el accionar del Gobierno y la Gendarmería. El apoyo crece.

Varios comentarios en las sala de maestro dicen que parecería que en este país quitarle el pan de la boca a los hijos de los trabajadores no es delito. Pero protestar para conseguir ganarse el sustento sí lo es. Porque el derecho de los buitres a tratarnos como quieren mientras hay despidos y suspensiones, mientras las escuelas se caen a pedazos, el derecho de SU PROPIEDAD, es sagrado, inviolable. Con la convicción de que la solidaridad laburante es la única que le puede frenar la mano a la multinacional yankee, la burocracia del SMATA y el gobierno, llegamos al acampe.

Éramos docentes de la 9 de Abril, con compañeras de las escuelas que quisieron venir a solidarizarse, junto a docentes del Bachillerato Popular 2 de Diciembre (nombre que hace honor a las jornadas de la “Semana Trágica”). Y junto con nosotros también estaba María, trabajadora textil inmigrante de la fábrica Elemento (que trabaja nada más y nada menos que para la esposa de Macri), que fue despedida por el gran delito de organizarse para pelear por sus derechos y los de sus compañer@s. ¡Unidad de los trabajadores!

Una vez en Pacheco les acercamos las bolsas con alimentos que recolectamos en nuestras escuelas. Los laburantes despedidos de Lear nos recibieron con los brazos abiertos. En ese momento no había much@s porque el día había sido largo luego de la asamblea y la visita de una delegación de laburantes aeronáuticos que también habían ido a solidarizarse. Con quien más pudimos tener el gusto de compartir fue con Titi, uno de los despedidos. Nos habló mucho pero no solo del conflicto y la jornada nacional del martes (que reivindicaba), sino también de sus cuestiones personales, la relación con la familia, como lo estaba viviendo y cuales eran sus problemas. Así pudimos sentir en nuestra fibra íntima como la lucha de clases remueve todo. Cómo cuando uno toma el camino de plantarse, de levantar la cabeza tantas veces obligada a agacharse por la dictadura patronal esta cambia, y se ve todo más claro.

Nos hizo notar la simpatía que genera entre los trabajadores la campaña solidaria con su lucha por la reincorporación que desarrollamos desde la 9 de Abril. Nos contó, por ejemplo, que en el acto del 9 de julio fue a la escuela de sus hijos y al verlo con la campera de Lear, una maestra se le acerco a hablar y le contó que estaban distribuyendo la cartita que nuestras compañeras del SUTEBA Tigre impulsan. Les contamos que en CABA hacíamos lo mismo. Y esta trabajadora de la educación lo hizo pasar al frente para que le cuente al resto de las familias el porqué de su lucha. Y cómo no hacerlo, si los despedidos son padres y madres que llevan a sus hijos a nuestras escuelas públicas, a la escuela por la que peleamos cada día junto con ellos.

Luego llegaron luego de la reunión del Encuentro Sindical Combativo de Norte, el Pollo sobrero de Izquierda Socialista y el Chino Heberling del Mas, también a traer la solidaridad. Ahí se armó una nueva ronda con otros trabajadores despedidos que se sumaron. Contamos un poco las peleas que damos en nuestro gremio. Y cómo logramos que tanto la UTE kirchnerista como Ademys (del cual integramos la conducción) repudie tanto los despidos como la represión del gobierno, y se sumen a la campaña solidaria de juntar alimentos para los despedidos. Contamos que ellos son la lista Celeste y es combativa! ¡Pero que la burocracia en nuestro gremio también Celeste pero están con el gobierno! ¡Hubo risas cómplices!

En ese momento tomó la palabra María, de Elemento, que con su voz bajita pero su moral bien alta supo transmitir la fuerza para sostener la lucha. Nos emocionó a todos. No podíamos parar de aplaudir.

Fue una jornada obrera, fraterna. De la que nos despedimos con ganas de seguirla, con la certeza de seguirla. Porque ellos tienen fabricas, ministerios, burócratas traidores, balas, gases, mercenarios de uniforme. Pero no tienen lo que nosotros: dignidad, la firmeza de de pelear por cada compañero hasta el final, compañerismo. Y eso, que lo sepa la empresa, el SMATA, Berni y Cristina... eso, con balas no se mata.

CORRIENTE NACIONAL 9 DE ABRIL

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