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Volante del PTS Neuquén

¡Con el asesino no se negocia! ¡Fuera Sobisch!

PTS

12 de abril 2007

Los trabajadores y el pueblo de Neuquén dimos una contundente respuesta al fusilamiento del compañero Carlos Fuentealba. El lunes el paro y una movilización histórica recorrieron las calles de Neuquén y hasta el último rincón del país.

El asesino respondió provocándonos. “Me quedo” dijo y nombró como super-ministro a uno de sus estrechos colaboradores que todos los trabajadores conocemos… Jorge Lara. Sobisch está en el aire, pero el lobbista de las petroleas no quiere renunciar. Quiere conformarnos con un policía preso y dos o tres renuncias como chivos expiatorios. Pero el grito del lunes todavía retumba: “¡Fuera el asesino Sobisch!”

Como dijeron las Madres de Plaza de Mayo en el acto, “la sangre derramada no se negocia”. Al asesino hay que echarlo, no sentarse a negociar ni con él ni con sus ministros.

Hay que redoblar la unidad y la movilización hasta que se vaya.

Al día de hoy ni un solo docente de ATEN está dando clases. Los trabajadores de la salud paralizan los hospitales. En Acción Social y el resto de las reparticiones públicas sólo se pasean los jefes y funcionarios. A este paro de 48 hs. de ATE se suman los docentes privados de SADOP, los docentes y no docentes universitarios. Los obreros ceramistas votaron en asambleas ir al paro en las 4 fábricas. Los estudiantes de la Federación Universitaria del Comahue y los jóvenes de los secundarios y los terciarios son parte de esta lucha. La inmensa mayoría de la población comparte nuestros reclamos. Todos repudiamos al que ordenó el fusilamiento.

La posibilidad de echar a Sobisch es hoy más cierta que nunca. En las calles y en el repudio popular está la fuerza necesaria para que se vaya. No en los pasillos de la legislatura ni en la vía muerta del juicio político que impulsan, entre otros, los kirchneristas que avalan la militarización de las escuelas de Santa Cruz.

Hay que echarlo. Tenemos que preparar la huelga general en el camino de un levantamiento de los trabajadores y el pueblo, un verdadero neuquenazo. Las escuelas, los hospitales, las dependencias del estado, Zanon, las fábricas, los pozos petroleros y la universidad tienen que transformarse en centros de organización donde debatamos y organicemos una asamblea provincial para llamar a la huelga general con piquetes y cortes de puentes hasta que se vaya Sobisch e impongamos nuestras reivindicaciones. Los trabajadores y organizaciones que ya estamos en lucha tenemos que llamar al resto a que se sume. Los petroleros pararon la producción en los pozos. Camioneros y bancarios marcharon junto a nosotros. Hay que sumarlos y se puede, como el año pasado cuando petroleros y docentes estuvimos juntos en los piquetes de Rincón. Para el PTS este es el camino por el que hay que luchar en cada asamblea.

Los trabajadores somos los que movemos la economía y hacemos andar la provincia y el país. Esta fuerza la tenemos que desplegar en una huelga general porque somos los que tenemos el poder para echar al asesino, imponer nuestras demandas y terminar con este régimen de la Repsol y las multinacionales petroleras que saquean nuestros recursos naturales.

¡NO NOS SENTAMOS A NEGOCIAR CON EL ASESINO!

¡CASTIGO A LOS RESPONSABLES MATERIALES y POLITICOS DEL FUSILAMIENTO DE CARLOS!

¡PREPAREMOS LA HUELGA GENERAL PARA QUE SE VAYA SOBISCH E IMPONER NUESTRAS DEMANDAS!

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