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Salud

Colapso del sistema público de salud

Trabajadores/as de la salud del Hospital Provincial Castro Rendón respirando en forma manual durante más de 6 horas a dos pacientes en grave estado general, la policía reclutando médicos de guardia de un hospital para ir a cubrir guardias a otro hospital, un fallo de la justicia en la cual les prohíben a dos anestesistas renunciar, son los hechos que terminaron de desnudar en forma descarnada y extrema la situación que venimos desde hace años denunciando los trabajadores de la salud.

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20 de septiembre 2007

Trabajadores/as de la salud del Hospital Provincial Castro Rendón respirando en forma manual durante más de 6 horas a dos pacientes en grave estado general, la policía reclutando médicos de guardia de un hospital para ir a cubrir guardias a otro hospital, un fallo de la justicia en la cual les prohíben a dos anestesistas renunciar, son los hechos que terminaron de desnudar en forma descarnada y extrema la situación que venimos desde hace años denunciando los trabajadores de la salud. La crisis de la salud pública pone en jaque la salud de toda la población. El gobierno del MPN responde acusando a los trabajadores de montar un show político.

El Miércoles 19 de septiembre, cientos de trabajadores, pacientes y vecinos de Neuquén respondieron al llamado de los trabajadores de salud y se movilizaron conjuntamente al grito de ¡Gore renunciá! Gore, el ministro de Salud, es la cara visible de un gobierno que mientras vacía el sistema público de salud y deja enfermos en la calle, dice que el problema es que los enfermeros piden muchas licencias y que “tiene enquistado en su interior dos grupos de militantes políticos, como son la Asociación de Profesionales y la junta interna del gremio ATE, que están tratando de hacer con el hospital exactamente lo mismo que hicieron hace dos años con el hospital Garrahan en Buenos Aires”.

Ni una palabra de aumentar el presupuesto para la salud, ni mucho menos de aumento de salarios. La actitud intransigente del gobierno requiere una respuesta contundente de nuestra parte. No podemos permitir que nos culpen a nosotros de este vaciamiento. El MPN no puede decir que no hay plata para dar respuesta a nuestros reclamos ni a los del resto de la población cuando la Repsol se lleva $ 10.000 por minuto de renta petrolera. Hay que pelear por un plan de lucha construido de abajo hacia arriba, para exigir aumento de presupuesto, de salarios, pase a planta de contratados, monotributistas y en negro, entre otros puntos. Y convocando asambleas de trabajadores por sector, por hospital, e interhospitalarias, y la coordinación de acciones con todas las organizaciones sociales, sindicales, etc. es la forma de torcerle el brazo al gobierno.

Agrupación Violeta/Negra

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