A pesar de tantos años en que los ideólogos de los explotadores se esforzaron en dar por muerta cualquier idea de revolución, la magnitud de la lucha emprendida por las masas bolivianas, suscita entre los trabajadores, jóvenes y estudiantes, un gran interés.
Así se expresó en la gran concurrencia que participó de la charla, donde más de 80 personas demostraron la avidez existente no sólo por conocer los últimos acontecimientos, sino especialmente las enseñanzas que se desprenden de los mismos.
Evidentemente, las luchas con que se abrió el nuevo siglo en nuestro continente ponen a la orden del día varios debates. Por ejemplo el que planteó al presentar la charla Carlos ‘Manotas’ Saavedra (obrero de Zanon y militante del PTS) sobre la necesidad de que los trabajadores avancen en la construcción de partidos revolucionarios.
Luego, las exposiciones realizadas por Esteban Vedia y Noelia Barbeito (estudiantes de Historia de En Clave ROJA) reseñaron los grandes hitos de la clase obrera boliviana y las contradicciones que tendrá que resolver la revolución en el hermano país.
En el debate, caracterizado por la cantidad y calidad de intervenciones, pudo apreciarse que el hecho de que tantas energías puestas en movimiento por las masas sin obtener triunfos decisivos, lejos de generar escepticismo, abre grandes interrogantes. Uno de ellos fue alrededor del desarrollo de organismos para concentrar todo el poder popular diseminado en las barricadas, bloqueos y minas en una Asamblea Popular, que permita a las masas bolivianas conquistar el gobierno de sus propios destinos. Desde aquí, un trabajador de la salud que vienen sosteniendo desde hace meses una gran huelga reflexionaba que, salvando las distancias entre Asamblea Popular en Bolivia con la política de Asamblea Provincial que algunos sectores levantan en Neuquen, es válido como método que unifique todas las luchas para solucionar nuestros reclamos. 
Otras intervenciones giraron alrededor del problema de las autonomías; la nacionalización de los hidrocarburos; la particularidad boliviana de estar compuesta mayoritariamente por pueblos originarios y campesinos; y las tareas que de esto se desprenden para que la clase obrera en la pulseada decisiva, pueda ser una alternativa y conquistar un Gobierno de los trabajadores, campesinos y pueblos originarios que den una salida a la crisis en uno de los países más pobres de Latinoamérica.