por Agrupaciones Violeta Negra – ATE y Negra – ATEN (Neuquén)

Este 21, 22 y 23 de noviembre se va a realizar en Neuquén el Segundo Encuentro Nacional hacia una Constituyente Social. La principal convocante es la conducción de la CTA nacional, junto a otras organizaciones “sociales”.
Este proyecto logró unir tanto el kirchnerista Yasky como el sojero De Gennaro.

Muchos trabajadores y trabajadoras de base y de organizaciones sociales ven en esta Constituyente Social la posibilidad de juntarse y “empezar a caminar todos juntos” o piensan honestamente que la Constituyente puede ser un “espacio” amplio, incluso donde se puede “pelear” por darle un contenido “clasista” o, al menos, para fortalecer la lucha. Pero si miramos bien podemos ver cuál es la verdadera política de la conducción de la CTA.

Sin tocar a los capitalistas

Como ejes centrales de su programa levantan la redistribución de la riqueza, la soberanía y la democracia participativa.

Cuando hablan de “redistribución de la riqueza”, no proponen tocar ninguna empresa capitalista ni sus ganancias. ¿Cómo piensan llevar esto adelante? ¿Opinan que habrá algún empresario “bueno” que esté dispuesto a “compartir” sus ganancias?

Cuando plantean la soberanía sobre nuestro suelo dicen que la clave es recuperar los recursos naturales “extranjerizados”, pero no dicen cómo. ¿Será de la mano de empresarios “nacionales” como Ezkenazi o Cristóbal López? De la renacionalización de los recursos naturales para ponerlos bajo administración de los trabajadores, ni una palabra. Y si de pelear contra las empresas imperialistas se trata, la CTA ya empezó mal: ni siquiera tuvieron el “reflejo” de apoyar a los trabajadores de Kraft- Terrabusi que llevaron adelante una dura y larga lucha contra una de las patronales imperialistas más ricas del mundo.

Finalmente, toman como ejemplo de “democracia” lo realizado por el gobierno de Lula en Brasil con la puesta en marcha del presupuesto participativo. Este instrumento, como las “consultas populares”, nos hace creer que podemos decidir sobre tal o cual cosa, si queremos que la plata vaya para acá o para allá, pero en última instancia sólo sirven para decir qué hacer con las miserias que nos brinda el capitalismo.

Todo esto va de la mano a que invitan a formar parte de esta “construcción” a los pequeños y medianos empresarios y a sectores patronales del campo, como la Federación Agraria, aliada a la Sociedad Rural. No hace más que llevar a los trabajadores a confiar en distintas variantes patronales o de centro izquierda como Proyecto Sur o el partido de Sabatella.

Para muestra sobra un botón: el UNE

Los dirigentes de la CTA utilizarán esta Constituyente Social para lanzar un proyecto político nacional, y en ese camino lo que tienen para mostrar es Unión de los Neuquinos (UNE). En Neuquén hace ya cuatro años que crearon el UNE. A lo largo de estos cuatro años fuimos viendo cómo este nuevo partido, con la excusa de construir poder desde adentro, fue aliándose a distintos sectores sin importar si esto beneficiaba o no a los trabajadores. Así fue como actualmente forman parte del gobierno municipal de la UCR que reprimió a los vecinos del barrio Confluencia, y “coquetean” con distintos sectores del MPN argumentando que ellos quieren ser como el “MPN de los orígenes”.

Lejos de esto, desde la Violeta Negra de ATE y la Negra de ATEN impulsamos y formamos parte del Plenario de Trabajadores Clasistas propuesto por Zanon. Una corriente que levanta bien alto el clasismo y la independencia política de todos los partidos con intereses ajenos a la clase trabajadora.

Llamamos a todas las agrupaciones, delegados y activistas de ATE, ATEN y la CTA que quieren impulsar una política clasista en nuestra Central a dar juntos esta pelea.