Quería llamar la atención primero, sobre dos elementos políticos importantes que han sucedido desde el fin de las elecciones primarias. El primero es el agravamiento de la crisis capitalista internacional (…) El otro aspecto (…) es que (…) Cristina se la ha pasado recorriendo reuniones con los empresarios de la industria, agrarios, para decirles que su gobierno va a garantizar su nivel de rentabilidad, su ganancia, que va a contener a los trabajadores y a la vez en varios de esos discursos que ha dado utilizando permanentemente la cadena nacional, este gobierno se ha dedicado a fustigar a los trabajadores que luchan, en particular lo hizo contra los trabajadores del subte, supuestamente con ironía ha dicho que es fácil ser revolucionario en este país. Yo quisiera recordar que no sólo no es fácil ser revolucionario en este país, sino luchar consecuente por las reivindicaciones obreras y populares, no es fácil. (…) En contra de esta orientación el Frente de Izquierda obtuvo en las primarias una muy importante victoria política, logramos el respaldo de trabajadores, de jóvenes que nos ayudaron a quebrar el piso electoral que nos permite estar presentes en este debate político de cara a las elecciones de octubre levantando las únicas banderas anticapitalistas, socialistas, internacionalistas que van a aparecer en esta elección, y levantando los reclamos de la clase trabajadora, el pueblo explotado, el pueblo oprimido, de todos los que luchan por sus derechos democráticos y de la juventud, como no se van a escuchar de la boca de ninguno de los otros candidatos. (…) Nosotros no somos ni partidos, ni organizaciones que sólo aparecen en la campaña electoral, nosotros tenemos una actividad política permanente en el seno de la clase trabajadora, de la juventud, ya que no separamos la lucha en el terreno electoral de la lucha de clases activa que llevan los trabajadores en las luchas por sus reivindicaciones.