Ante el llamado de la Federación Agraria y la Sociedad Rural a nuevas medidas de acción, Izquierda Socialista ha retaceado el apoyo que le brindó al anterior lock out patronal de la misma manera que lo hicieron la CCC y el MST de Ripoll. ¿Por qué? “Lamentablemente – dice IS- los dirigentes de la Federación Agraria, encabezados por Buzzi y De Angeli, siguen con la misma política de unidad indiscriminada con las otras entidades”. Justifican su postura anterior sosteniendo que “Nos movilizamos contra Cristina y la oligarquía, permanentemente denunciando que la Federación Agraria le cedía a la Sociedad Rural, a Confederaciones Rurales Argentinas y a Coninagro, al sostener un punto de unidad correcto - la derogación de la 125-, pero negándose a levantar el resto de los reclamos, empezando por el de retenciones diferenciadas para los pequeños productores, y siguiendo por su programa histórico de reivindicaciones, que llega, recordemos, hasta la reforma agraria”. Si, como sigue sosteniendo IS, “la derogación de la 125”, es decir la baja de las retenciones para todos los capitalistas del campo, era “un punto de unidad correcto”, ¿cuál es la diferencia esencial con el reclamo actual? El flamante líder de la Sociedad Rural, Hugo Biolcatti ha planteado el mismo reclamo que IS “retenciones diferenciadas para los pequeños productores”, sobre la base de una nueva rebaja en las retenciones para todos. Este reclamo de liberalización de precios (al que como alternativa proponen “un dólar más alto” si no rebajan las retenciones) fue lo que unió a la Federación Agraria con la Sociedad Rural, antes y ahora.

La verdad es que, lejos de haberse movilizado“contra Cristina y la oligarquía”, IS manifestó en el Rosedal de Palermo contra Cristina, sí, pero con la oligarquía, lo que le ha redundado (al igual que al MST y al PCR) en un extendido rechazo de amplios sectores de los trabajadores y el movimiento estudiantil. Por ello IS intenta reubicarse, pero sosteniendo las mismas consideraciones sobre el programa liberal de la rebaja de retenciones que en marzo fue sostenido por el reaccionario método del bloqueo de alimentos contra el pueblo. Ante semejante cosa IS sigue criticando a la Federación Agraria por no defender “su programa histórico de reivindicaciones” y considerando que la derogación de la 125, es decir el triunfo del frente unido de los capitalistas de la soja, fue “una victoria popular”. Como dijimos en su momento, la izquierda que apoyó lock out patronal traspasó los límites de clase y militó en el campo político de las patronales agrarias. Ahora IS quiere volver, pero tiene enganchado el pantalón en el alambrado.