En la casa socialista “Mayo Francés” de Morón, que sirvió para que se organizaran los compañeros de las empresas tercerizadas de Telefónica, se realizó el 28/4 una charla con más de 60 compañeros. Expusieron en la charla sus opiniones: Carlos Artacho, delegado de los telefónicos del edificio Costanera y dirigente del PTS, Titín Moreira por la dirección nacional del PTS y un trabajador de una empresa contratista, organizador de este importante proceso.
Artacho planteó que el proceso de los compañeros telefónicos es parte de un enorme proceso internacional. Expresó el valor de enormes procesos como el de Francia por el retiro de los contratos basura, o el de EEUU con las grandes movilizaciones de los trabajadores hispanos. A continuación expresó la necesidad de unir las filas de los trabajadores, organizando en común a contratados, efectivos y tercerizados para poder triunfar. Continuó el compañero de empresa contratista relatando cómo después de más de 10 años trabajando en distintas empresas, los tercerizados habían perdido el miedo y que eso era lo distintivo del proceso. Otros trabajadores presentes reafirmaron la posición del compañero, demostrando que hay un cambio importante en el ánimo de los trabajadores.
Por último cerró la ronda de discusiones Moreira, planteando cómo la lucha de los tercerizados enfrentaba un verdadero punto nodal de la explotación capitalista. En todo el mundo las empresas trasladan sus plantas a países con menores derechos, dividen las empresas contratando sectores con menores salarios, toman indocumentados, etc. De esta forma la clase capitalista le roba a los trabajadores una tajada extra de la que roba cuando paga los salarios. La división impuesta entre los trabajadores y la masa de utilidades extraordinarias conseguidas por esta vía juega un rol fundamental en el mantenimiento de las ganancias patronales y la dominación sobre la clase obrera. Así, la lucha por unir y homogeneizar a los trabajadores es profundamente revolucionaria y no va a resolverse en forma pacífica y evolutiva, como ya lo adelantan los patrones yanquis que empiezan a tomar represalias a los indocumentados por atreverse a marchar por sus derechos.
Por eso, los compañeros que han perdido el miedo y ven de frente esta pelea, que quieren terminar con estas divisiones que nos impuso la patronal, tienen que prepararse para un enfrentamiento con los capitalistas y sus partidos, tienen que prepararse para una lucha política que va a superar los marcos de las peleas empresa por empresa y que pone al día la necesidad de que los trabajadores avanzados construyan su herramienta política para triunfar: un partido de trabajadores revolucionario.