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Elecciones en Gran Bretaña: El triunfo pírrico de Blair y el voto protesta contra la guerra en Irak

19 de mayo 2005

El 5 de mayo se realizaron elecciones generales en Gran Bretaña. Pese a que Tony Blair logró un nuevo triunfo, el resultado refleja la profunda crisis del Nuevo Laborismo y de la derecha conservadora, la sorpresa fue la importante votación a favor de la coalición Respect1 que obtuvo un diputado, un hecho de gran repercusión ya que desde 1945 la izquierda que se presenta fuera del Partido Laborista no logra representación parlamentaria.
Muchos medios calificaron el triunfo electoral de Blair como una victoria pírrica. No es para menos. Si bien es cierto que el laborismo conquistó por primera vez un tercer mandato consecutivo, obtuvo sólo el 36% de los votos, el resultado más bajo en la historia de Gran Bretaña.
El ‘triunfo’ de Blair no es entonces reflejo de una fortaleza del laborismo –ya que perdió 47 escaños en el Parlamento– ni sirve para ocultar sus profundas grietas internas; muy por el contrario, ni bien se conocieron los resultados los medios decían: “el tema no es si Blair se va o no, sino cuándo”.
Las elecciones evidenciaron la enorme desilusión de los trabajadores con el gobierno laborista que generó expectativas en las masas cuando asumió en 1997 luego de 18 años de thatcherismo. Este descontento se expresa también en la crisis abierta en la relación orgánica del Partido Laborista con los sindicatos, que está dando lugar a algunos fenómenos como el surgimiento de direcciones sindicales alternativas a la burocracia tradicional.
La crisis mayor del gobierno de Blair no tiene sus raíces sólo en la política interna sino que hizo eclosión con la gran oposición a la guerra en Irak que dio lugar a las movilizaciones históricas de más de un millón de personas y que llegó a poner en riesgo la continuidad del propio gobierno. Además, Blair enfrentó varias ‘rebeliones’ parlamentarias de sus propios diputados que se negaron a acatar la disciplina partidaria sobre la guerra.
Al calor de este movimiento surgió un activismo de los jóvenes en las escuelas y universidades, en amplias capas de docentes y empleados públicos y en la población de origen musulmán que caló hondo en la sociedad.
La combinación de estos elementos y sobre todo la emergencia de un nuevo activismo y el sentimiento contra la guerra, es lo que explica el gran cambio en el mapa electoral británico: el descontento con el laborismo no fue capitalizado mayoritariamente por los conservadores, sino por los Demócratas Liberales2, y sectores “progresistas” y de izquierda como los Verdes y sobre todo Respect.

Respect: una expresión electoral del sentimiento contra la guerra

En 5 de los 26 distritos donde se presentó, Respect obtuvo resultados cercanos y/o superiores al 20%3. Hizo una elección histórica en un país donde la izquierda no tiene tradición electoral independiente del laborismo y donde no hubo partidos comunistas de masas como en Francia o Italia4.
El mejor resultado de Respect fue en el distrito de Bethnal Green, que llevaba como candidato a George Galloway5, diputado expulsado del Partido Laborista por su oposición a la guerra en Irak. Galloway obtuvo 35,9% de los votos, superando a la candidata laborista a favor de la guerra Oona King6. Bethnal Green es un barrio del este londinense, con gran índice de pobreza, habitado mayoritariamente por inmigrantes de Bangladesh y de origen musulmán. La pérdida del voto obrero y popular de la comunidad musulmana en este distrito –que históricamente votaba al laborismo– es una gran paliza para Blair.
Galloway se ha transformado en una figura relevante –con trascendencia internacional- a partir de su oposición a la guerra de Irak. Incluso EE.UU., en un intento de defender a su mejor aliado, Blair, lo citó a declarar al Capitolio, acusándolo de haberse beneficiado con el programa Petróleo por Alimentos y de hacer tratos comerciales con el régimen de Hussein. La visita de Galloway produjo un escándalo, ya que como informan algunos medios “convirtió su comparecencia en una especie de tribunal político en el que condenó a EE.UU. por haber cometido con la invasión de Irak el mayor crimen contra la humanidad de la historia reciente” (El País, 18-5). Su declaración incluyó frases como “Senadores, todo lo que yo decía antes de la guerra ha acabado siendo verdad y todo lo que ustedes decían ha resultado ser mentira, y por culpa suya 100.000 personas han muerto en esta guerra, entre ellas 1.600 soldados de su país”, y no ahorró denuncias contra el beneficio que vienen obteniendo compañías norteamericanas como Halliburton de la invasión a Irak.
Todo su “izquierdismo” se agota, sin embargo, en la oposición a la guerra en Irak, y sin ir más lejos, su catolicismo activo lo llevó a oponerse a conquistas democráticas elementales como el derecho al aborto, ubicándose en este terreno a la derecha de posiciones tradicionales del laborismo.
Pero no fueron sólo los votos a Galloway. Respect también obtuvo buenos resultados en otros distritos. En Birminghan, una ciudad del centro del país, con un alto grado de desocupación y alta población musulmana, la candidata de Respect, Salma Yaqoob, una catedrática musulmana obtuvo 27,5% de los votos ubicándose segunda después del Laborismo.
En los distritos londinenses de West Ham y East Ham, Respect también salió en segundo lugar después del laborismo, con un 19,5% y 20,7% respectivamente y en Poplar y Canning Town (este de Londres) el candidato de Respect obtuvo 17.2%.
La principal fuerza motora de Respect es el partido de izquierda (trotskista) Socialist Workers’ Party, cuya política fue transformar la coalición Stop the War en una alianza electoral que cuenta con el apoyo de las direcciones musulmanas de las mezquitas y está avalado por la Muslim Association of British (MAB), la segunda organización religiosa de dicho credo en importancia en el Reino Unido que tiene entre sus propósitos y objetivos “esparcir las enseñanzas y la cultura del Islam”7.
Al igual que en otros lugares de Europa, Respect representa la emergencia de coaliciones anti-neoliberales o “anticapitalistas”, como el Bloque de Izquierda de Portugal y la Alianza Roja y Verde de Dinamarca. Posicionándose como parte de ese movimiento8 de partidos amplios que luchan contra el “social liberalismo”, el racismo, la privatización y a favor del estado de bienestar y el sindicalismo, Respect justifica una alianza con sectores burgueses musulmanes y ex laboristas.
Sectores de vanguardia obrera y juvenil vienen haciendo una experiencia con el Partido Laborista en el poder, planteando la posibilidad de dar pasos en superar la subordinación de la clase obrera a su dirección histórica. Pero Respect, más allá de canalizar el voto de oposición más radicalizado contra Blair, no ayuda a esta perspectiva, sino que expresa una política frentepopulista y electoralista, de unir a todos los que “se oponen a Blair” sin tener como estrategia el desarrollo de una verdadera alternativa de clase al laborismo.

1 RESPECT, sigla en inglés por: Respeto, igualdad, socialismo, paz, medioambiente, comunidad y sindicalismo.
2 Si bien el partido Demócrata Liberal es un partido burgués, al haberse opuesto a la guerra ‘agarró’ a muchos votantes por izquierda. El conocido intelectual y dirigente del movimiento contra la guerra Tariq Ali publicó una nota llamada ‘Por un día soy demócrata liberal’ para justificar el voto a dicho partido frente a la candidata pro-guerra del laborismo en su zona.
3 De acuerdo al sistema electoral británico, de mayoría simple y por distrito, para conseguir un diputado hay que superar a cualquiera de los partidos mayoritarios en el respectivo distrito, haciendo muy difícil para los partidos pequeños, y la izquierda en particular, lograr un escaño.
4 Hubo sólo dos diputados comunistas que se presentaron por fuera del laborismo, en los años 1935 y en 1945.
5 George Galloway fue diputado por el Partido Laborista en Escocia desde el año 1987, hasta su expulsión en octubre de 2003. Dicha expulsión no le impedía seguir estando como diputado en el parlamento británico (en Londres).
6 En las elecciones anteriores, King, de raza negra, había logrado una mayoría de 10,000 votos sobre los otros partidos en este distrito considerado una ‘banca segura’ del laborismo.
7 www.mabonline.net
8 Socialist Worker No 1951, 14 de mayo de 2005 ‘Un movimiento recorre Europa’.

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