Nuevamente como en el ‘98, cuando se intentó implementar la Ley Federal en la Capital, se lanza un ataque contra la educación, esta vez contra las especialidades de los técnicos y artísticos, primarizando nuestra educación. A esto se suma la lamentable situación edilicia de los colegios y las magras e insuficientes becas y viandas, que dejan fuera de la educación a miles de jóvenes, cuyo único destino es la miseria o trabajar superexplotados con los contratos basura.
A todo esto, los jóvenes convivimos con la persecución constante de la policía represiva, que tiene entre sus diversiones favoritas, molestarnos y acosarnos. Blanco seguro del gatillo fácil, como fue el caso de Leandro Barrau. Y ahora con el nuevo código le quieren dar más poder a la mafia policial del gatillo fácil.
El viernes 16, los estudiantes nos movilizamos a Jefatura de gobierno a reclamar por nuestras reinvindicaciones y contra el código. Estábamos presentes 600 compañeros de numerosos colegios como el Fader, Moreno, Acosta, Avellaneda, Cortázar, entre otros. A dos cuadras de ahí, en la Legislatura, la policía ya reprimía con agua a los manifestantes. Ante esto, los estudiantes decidimos acompañar esta lucha comprendiendo la gran traba que significa este código a la hora de salir a la calle.
Los medios se esforzaron en pintar los hechos como obra de pequeños sectores de "ultraizquierda". Pero la presencia de centenares de jóvenes desmiente estas injurias. Nuestra presencia significó un gran avance en la lucha de los estudiantes, uniéndonos a otros sectores como las compañeras travestis o los vendedores ambulantes, mostrando al mismo tiempo que somos grandes sectores de la población -y no pequeños grupos- los que nos oponemos.
En esa jornada decenas de policías de civil, a la par de sus amigos uniformados avanzaban, encargándose de encarcelar a varios manifestantes. Ante esto, en una asamblea realizada despues de la represión, los jóvenes del PTS junto a nuestros compañeros del No Pasarán, mocionamos marchar inmediatamente a Jefatura de policía a exigir la libertad de los compañeros. La moción fue aprobada por la mayoría.
La lucha contra el Código es contra la represión y por la liberación de todos los detenidos. Los estudiantes que además de pelear por nuestra educación y nuestros reclamos, participamos activamente contra el código, hemos ratificado en nuestra Coordinadora que marcharemos nuevamente el miércoles 4. Esta lucha recién comienza.