Después del paro y la importante movilización del 4 de octubre, en la que unos 5 mil docentes salimos a las calles para repudiar un nuevo ataque del macrismo a la educación pública y gratuita, este jueves 20 las y los maestros volvemos a las calles para defender nuestro estatuto y exigir el retiro inmediato del proyecto macrista, que con el apoyo de la Coalición Cívica, presentó el PRO en la legislatura porteña. Fue en el marco del paro de 48 hs que acordaron todos los sindicatos de la Ciudad.

Hasta allí marcharemos para denunciar nuevamente que con la disolución de las Juntas de Clasificación y Disciplina (algo que solamente se animó a hacer la dictadura militar) y con la regimentación de los Centros de estudiantes (que el gobierno del PRO impuso mediante decreto), el macrismo pretende armar las escuelas a su antojo para avanzar con el proyecto privatizador que inició en su primer mandato: subsidios millonarios a las escuelas privadas y religiosas, desfinanciamiento de la escuela pública, salarios inferiores a la canasta familiar, pésimas condiciones de estudio y de trabajo y, como si fuera poco, listas negras, escuchas y persecución a quienes nos organizamos para frenar estos ataques.

Está claro: para pararle la mano al macrismo tenemos que ser miles los que nos organicemos en cada escuela y en cada distrito, y miles los que salgamos a las calles a hacer oír nuestra voz. Porque sólo con la organización desde las bases y fortaleciendo la unidad con toda la comunidad educativa podremos enfrentar este nuevo ataque, y avanzar en la pelea por conquistar nuestros derechos. Por eso también, en nuestra intervención en las escuelas, asambleas y plenarios, venimos planteando la necesidad no sólo de que se respeten los mandatos de las asambleas, sino también la necesidad de organizar nuestra fuerza de manera independiente a los partidos patronales y a los gobiernos de turno. Como el de Macri y el de los K, que cogobiernan con el PRO y le votan el 75% de la leyes en la Ciudad, como muestra la creación de la Policía Metropolitana o el subsidio millonario a las escuelas privadas y religiosas, mientras se achica cada vez más el presupuesto destinado a la escuela pública.

Para fortalecer esta perspectiva, a la vez que nos movilizamos con todas nuestras fuerzas, desde la Corriente Nacional 9 de Abril/Lista Marrón llamaremos nuevamente a las conducciones de UTE, Ademys y demás sindicatos a transformar la movilización de este jueves en una gran Asamblea unitaria, de estudiantes y docentes (afiliados y no afiliados), para votar los pasos a seguir.

Y porque este jueves no puede ser uno más, a un año del asesinato de Mariano Ferreyra a manos de la burocracia sindical de Pedraza, vamos a llamar también a participar de esta cita de honor a toda la docencia, para culminar nuestra jornada de lucha confluyendo con las cientos de organizaciones sociales, políticas, sindicales, de derechos humanos y estudiantiles que marcharán a Plaza de Mayo para exigir el juicio y castigo a todos los responsables de su asesinato, el cese de la persecución y el desprocesamiento inmediato de los más de 4 mil luchadores y luchadoras obreras y populares que ya hay en nuestro país.

Llamamos también a las conducciones sindicales a estar a la cabeza de esta importante tarea, porque es imposible defender el elemental derecho a la educación si hay compañeros asesinados y perseguidos cuando salen a luchar.

Por Alicia Navarro Palacios

Integrante de la Corriente Nacional 9 de Abril, Secretaria de Derechos Humanos de Ademys y miembro de la Junta de Clasificación Primaria Zona II