Hay que ser sinceros. No se les ocurren ideas originales a los jefes por estos tiempos. Vuelven, una y otra vez, a las viejas recetas.
Resulta que en Venado Tuerto (Santa Fe) se juntaron los dueños de los campos y las fábricas. El gobierno municipal, preocupado por la situación económica, hizo de anfitrión bajo un pomposo título: la Red de Intermediación Laboral.

Allí estaban los empresarios del frigorífico Swift, de las metalúrgicas y autopartistas de la zona, los integrantes de la Cámara de Comercio y los distinguidos miembros de la Sociedad Rural. La reunión transcurrió entre anécdotas y sesudos análisis de hombres interesados en el futuro del país. Los medios, ansiosos, fueron al encuentro de las conclusiones, que plasmaron en sus titulares: “Intento empresarial para crear un registro de trabajadores conflictivos”. Y aclaran: “Empresarios de Venado Tuerto y su zona de influencia pidieron conformar los antecedentes judiciales de empleados para prescindir de ellos si hiciera falta”. Así nomás. Los hombres de negocios no anduvieron con vueltas: aquellos que enfrenten los despidos, que organicen a sus compañeros, que no agachen la cabeza ante el supervisor, pueden ganarse un lugar en la lista de indeseables. ¿Un brazalete, una pulsera magnética que haga chillar los molinetes de las plantas? Todavía no. Se conforman con una lista donde queden claros los antecedentes de los trabajadores que han realizado reclamos, para que no vuelvan a pisar sus fábricas, sus campos. No vaya a ser que anden contagiando al resto.

La parábola del buen trabajador

Cuando la noticia generó las primeras repercusiones negativas, empezaron a desaparecer los tíos de la criatura. Ahora el gobierno municipal (PJ) lo desmiente, pero fue quien convocó la reunión con el argumento de que “hay empresas que deben desprenderse de personal, pero otras están absorbiendo trabajadores; entonces queremos darle prioridad al buen trabajador”.(www.venadotuerto.gov.ar)

La CGT local también se desmarcó, aunque no tanto. Luego de asegurar que “participé de una reunión y me pareció un propuesta insólita, aberrante y fuera de lugar”, el titular de la CGT local Jorge Solá agregó que “el problema es cuando pretenden instalarlo de modo orgánico”. Todo bien con marcar a los activistas, pero hacer un registro ya es un poco mucho.

Nada nuevo. Lo que hoy pasa en Venado Tuerto es una vieja fórmula para evitar cualquier resistencia a los ajustes patronales. Las listas negras son tan viejas como las experiencias de organización del movimiento obrero. Ahora mismo, en la zona Norte, se persigue a los activistas de las huelgas, a quienes paran un atropello. En Córdoba los delegados de los trabajadores de Iveco - independientes del SMATA - no pueden ingresar a la planta, y el gremio quiere revocarles el mandato, a pesar de la oposición de los trabajadores. En medio de la crisis las denuncian los trabajadores de la electricidad en México y los obreros de la construcción en Inglaterra. (www.elperiodico.com)

Nostalgias

Venado Tuerto es una pujante localidad del sur santafesino, como le gusta decir a sus gobernantes. Se supone que en la zona se cosecha el 10 % de los cereales del país. La levantan con pala los patrones del campo y la industria. La Sociedad Rural local ha sido, fiel a sus raíces, una férrea defensora de la dictadura militar y su proyecto antiobrero. Fue en la ExpoVenado, realizada hace pocos meses, donde Néstor Roulet (CRA) señalara que “a este país lo hizo grande la Iglesia, el campo y el Ejército”. El frigorífico Swift cuenta con varios de sus obreros desaparecidos. Para no ser menos, el Secretario legal del municipio - el Dr Juan Vidal - fue intendente de Villa Cañas durante la dictadura, y está acusado de participar en la represión de esos años. ¿Será el encargado de confeccionar los registros?

En varios pueblos de Santa Fe, donde las empresas ligadas a la producción agroindustrial han ganado millones y miles de trabajadores han entrado a las fábricas, la crisis ha desatado distintas iniciativas. En Armstrong, el gobierno y los patrones, con la colaboración de algunos dirigentes gremiales, han buscado llevar a los trabajadores tras sus reclamos. Más a la vanguardia de su clase parecen estar los empresarios de Venado Tuerto, discutiendo sus listas negras para perseguir a los más decididos.

L. A.