LVO entrevistó a Néstor Echeto delegado de la Línea D de Subterráneos de Bs. As.

¿Contános por qué se da el conflicto y cómo lo piensan seguir?

El conflicto se da principalmente por un aumento del básico un 50 %, el reconocimiento de las horas nocturnas, reclamamos el 2% por año de antigüedad y una reivindicación que tiene que ver con las guarderías, reclamamos el pago de $240, en este momento se está pagando $80.




El lunes vence la conciliación y seguramente vamos a salir con medidas y se está discutiendo qué tipo de medidas, si paro escalonado o paro total o también que hacer si nos extienden la conciliación. 

Han establecido algún tipo de relación con otros sectores que están en conflicto, por ejemplo con los ferroviarios. ¿Piensan hacer algo en común? ¿Lo han discutido?

Si, en las asambleas que estamos haciendo se planteó el tema. Nosotros como cuerpo de delegados emitimos un comunicado de prensa; repudiando la represión y exigiendo la libertad inmediata de los compañeros detenidos y planteando que de seguir en esta situación los compañeros, nosotros en asamblea vamos a resolver medidas de fuerza exigiendo su libertad.

¿Querés agregar algo más?

Tenemos el juego del gobierno que por un lado presiona en algún momento a la empresa y por otro lado se abre de la negociación. Pensamos que la empresa tiene suficientes ganancias desde hace años, como para poder costear el incremento salarial. En términos de la recaudación de la empresa, se está hablando de un 2,5%, es el aumento que planteamos nosotros, por lo tanto en una empresa como Metrovias Subterráneos es irrisorio, no tiene incidencia.

¿Y la relación con los usuarios?

En general, siempre ha sido conflictiva, en este caso estamos empezando a volcarnos, primero con las conferencias de prensa y después con el trabajo de volanteo, volcarnos para tratar de dar vuelta la situación. Lo que pasa es que es bastante complejo en el sentido de que ellos cuentan permanentemente con los medios bombardeando a la gente, en donde le preguntan de una manera intencionada. Obviamente a alguien que va a trabajar y se encuentra que no tiene como ir a trabajar seguro está mal y aún cuando reconozca la justeza del reclamo, la persona lo que quiere es viajar, básicamente lo que le interesa es eso y entonces contrarrestar eso, por más que sean miles de volantes...




Cuando tomamos alguna medida, es bastante complicado convencer a los compañeros, de que hay que darse una política hacia el pasajero. Estamos en eso, vamos a ver si lo conseguimos.