“En última instancia, el Estado no es más que una banda de hombres armados”- al servicio de los capitalistas, en perjuicio de los trabajadores-, escribía uno de los fundadores del movimiento socialista internacional, Federico Engels. Qué justa esta definición, cuando empresarios como Carlos Pedro Blaquier, al que el ex gobernador Walter Barrionuevo, uno de los principales políticos de esa “junta que administra los negocios comunes de la burguesía”, en el ocaso de su gobierno lo definió como “el poder real en las sombras”. Blaquier cuenta con un destacamento de 70 “hombres armados” de gendarmería a su servicio para ejercer una dominación férrea sobre las vidas de los 8.000 obreros de la empresa y los 70 mil habitantes del Departamento Ledesma. Los que vigilan desde una seccional que se la presta la empresa, la que queda justo al lado de su gerencia de campo y frente al parque industrial y a la mansión, “la rosadita”. Además de la seguridad de la empresa y la gendarmería, el Jefe del directorio de Ledesma S.A.A.I., cuenta con una nutrida guardia de la policía provincial. La que junto a hombres de seguridad de la empresa disparó a quemarropa contra las familias trabajadoras que asentaban en lucha por la vivienda en tierras del ingenio azucarero, dejando un saldo de 3 jóvenes trabajadores asesinados, un tendal de heridos, detenciones, torturas y vejaciones. Pero si Libertador Gral. San Martín ya era un pueblo estrictamente vigilado y reprimido, hoy lo es aun más con la presencia desde hace medio año de la seguridad privada Proteger S.A., la última adquisición de la patronal en materia de “bandas de hombres armados”, en clara respuesta al “despertar obrero” que comenzó a expresarse en la región con la recuperación del sindicato de las garras de la burocracia sindical de Goitea y Montaño, la huelga de los obreros azucareros y del citrus, y la lucha por la vivienda.

En el allanamiento a Blaquier dictado por el juez Poviña, se encontró junto a legajos de compañeros desaparecidos, una lista negra de “la marcha del Apagón” de 2005, confeccionada por Word Division, una empresa yanqui de investigaciones. Obviamente, la lista que confecciona esta supuesta empresa, está plagada de datos de la seguridad de la empresa, gendarmería y la brigada de investigaciones de la policía provincial, que seguramente son parte ahora de los archivos del plan de espionaje del gobierno de CFK que ejecuta gendarmería nacional. Conclusión: los “nacionales y populares” K, que además le otorgan exenciones impositivas por 10 años a la producción de bioetanol y un 50% de subsidios a los gastos de la empresa en energía eléctrica, hacen los deberes para que capitalistas como Blaquier, con un ejército de hombres armados digan, “yo soy el Estado”. Hay que exigir a la justicia y al gobierno que se abran todos los archivos de Ledesma S.A.A.I., de gendarmería y la policía provincial. Para que se esclarezcan los crímenes contra la clase obrera de ayer y de hoy, y cese el espionaje y la persecución a los activistas obreros, organismos de DD.HH. y la militancia de izquierda.

Luego de intensas discusiones entre organismos de DD.HH., direcciones de organizaciones sociales, sindicatos y la izquierda, sobre si se llamaba a medidas de acción directa en los días que está citado a declarar Lemos, ex administrador de Ledesma S.A.A.I., y Blaquier, desde el PTS, junto a PO, la Corriente del Pueblo y al Movimiento Tupak Katari, que orienta Carlos “Perro” Santillán, estamos llamando a una movilización el viernes a las 16 hs. Porque entendemos que en la movilización, en la acción directa que los trabajadores y la juventud organicemos contra este empresario genocida y los policías y militares que le ofrecieron sus servicios en “Las Noches de los Apagones”, está la clave para que Blaquier sea juzgado y vaya preso por sus crímenes contra la clase obrera.