El sábado 3 de julio se realizó el "Segundo Encuentro Nacional por las 6 horas" convocado por el Cuerpo de Delegados de subterráneos. Unos 200 compañeros se hicieron presentes en el auditorio del Hotel Bauen recuperado por sus trabajadores. Ferroviarios de Oeste y Norte del Gran Buenos Aires, ceramistas de Neuquén, trabajadores de Brukman, activistas y dirigentes docentes, estatales, aeronáuticos, metalúrgicos de Villa Constitución y San Nicolás, los sectores más avanzados del movimiento obrero antiburocrático acudieron a la cita de los delegados del subte junto a la casi totalidad de los partidos de la izquierda.
A media tarde llegaron el compañero Páez de la comisión obrera provisoria de Río Turbio y el secretario gremial de los ceramistas neuquinos, Alejandro López, recién venidos del pueblo santacruceño. Las palabras del compañero minero denunciando a Néstor Kirchner como uno de los principales responsables de la tragedia que enlutó al conjunto del movimiento obrero sacudieron al conjunto de los presentes. Páez denunció además la complicidad de la burocracia de ATE y pidió la solidaridad con la comisión provisoria. López reivindicó la presencia de los ceramistas de Zanon junto a sus hermanos de clase del Turbio y se sumó al pedido de reconocimiento de la comisión provisoria.
Luego de un extenso y rico debate a propuesta de los compañeros de subte se resolvió constituir una "junta promotora" para hacer una campaña nacional por las 6 horas de trabajo con recuperación salarial, constituir un "espacio" por el desprocesamiento de los luchadores y –a instancias del secretario general de los ceramistas neuquinos, Raúl Godoy– una reunión especial para preparar la marcha que se concretó el 14 de julio para exigir el castigo a los culpables de la masacre del Turbio y el reconocimiento de la comisión provisoria. La junta promotora se reúne todos los jueves a las 19 hs. en el Hotel Bauen, Av. Callao al 300 de la Capital. El PTS apoya esta campaña y hará todos los esfuerzos para difundirla entre la clase trabajadora.

El debate

Dos puntos centrales recorrieron el debate. Por un lado, los ceramistas neuquinos, Celia Martínez de Brukman, Charly Platovsky de Lafsa (ex Lapa), entre otros, plantearon la necesidad de incorporar en la declaración de la campaña por las 6 horas un párrafo que denunciara al gobierno de Kirchner por haber ratificado las reformas laborales esclavistas de Menem y De la Rúa y ser el representante político de los capitalistas "nacionales", aquellos con los que viajó a China y en las fábricas incrementan la productividad en base al aumento de la jornada laboral. Polemizando con esta posición, un grupo de compañeros y representantes de algunas corrientes intentaron expresar que la campaña por las 6 horas es "objetivamente contra el gobierno". Algunos de ellos intentaron teorizarlo planteando que al ser "anticapitalista", porque cuestiona el núcleo del beneficio capitalista, estaba de más tomar como blanco a los gobiernos nacional y provinciales. Sin embargo, fue un delegado de Subte quien "blanqueó" la posición al plantear que no sólo en la base sino también en el mismo Cuerpo de Delegados de Metrovías había sectores de compañeros que aún confían en Kirchner. Al tratarse de una campaña política desde el PTS continuaremos un fraternal debate para que esta progresiva campaña apunte contra el poder político de los capitalistas –hoy encarnado en el gobierno K–.
Por otro lado, en especial los ceramistas de Neuquén presentes, hicieron hincapié sobre la necesidad que las organizaciones obreras presentes constituyeran un agrupamiento clasista y antiburocrático para, en primer lugar, darle todo el apoyo a los compañeros del Turbio y, asimismo, apoyar activamente a todas las corrientes antiburocráticas como en Subte, Astilleros, la Alimentación, docentes, etc., además de hacer una gran campaña nacional por el desprocesamiento a los luchadores (la mayoría de los presentes en esta reunión tiene causas penales por luchar). Este planteo quedó abierto. El rejunte burocrático de la CGT y el desembozado apoyo de la CTA al gobierno de Kirchner, y el incipiente pero importantísimo avance de las fuerzas antiburocráticas ponen a esta cuestión como una necesidad imperiosa.
Cabe destacar la notable ausencia del Partido Obrero. Tomando como excusa las "limitaciones" de la campaña planteada por los compañeros de Subte, el PO se abstiene de participar en una muestra de crudo sectarismo. La verdadera razón es que para esta agrupación todo agrupamiento que no pueda hegemonizar no merece existir. Lamentable.

La campaña por las seis horas

Desde el PTS consideramos que hay que realizar una campaña militante sobre esta cuestión vital para el movimiento obrero, para lograr la unidad de ocupados y desocupados y romper la lógica de la superexplotación de la fuerza de trabajo: trabajar menos para trabajar todos con un salario equivalente a lo que cuesta una canasta familiar. En este sentido, en la primera reunión de la junta promotora, propusimos hacer brigadas comunes de todas las fuerzas que impulsamos la campaña para hacerla gremio por gremio.