Volvamos a la Asamblea Interclaustros de Ciencia Política
para derrotar los ataques al pensamiento crítico en nuestra carrera

Por la autoorganización de los estudiantes de Ciencia Política en defensa de la libertad de cátedra y pluralidad ideológica. No al oscurantismo de Mayer y sus secuaces. Por cátedras paralelas en todos los horarios de cursada, con pluralidad ideológica

Parece que a la Dirección y Junta de Carrera de Ciencia Política la crisis económica internacional la está poniendo un poco nerviosa: la realidad se le está desplomando encima y necesitan fervientemente ocultarla. Consecuentes hasta el tuétano (hay que reconocérselos), el Director y la Junta (Alternativa Académica/LaVallese/UES/la Mandrágora) vuelven en un esfuerzo denodado a pretender enceguecer a los estudiantes de la carrera. Si algo quedaba en nuestro magro plan de estudios de pensamiento crítico, si alguna herramienta encontrábamos para entender "algo" de lo que hablan todas las tapas de los diarios del mundo, ellos van por más y quieren terminar de barrer con cualquier “utensilio” que los estudiantes podamos usar para intentar pensar, al menos, algunos aspectos de la convulsionada realidad nacional e internacional.

Todo cuanto atisbe un mínimo de pensamiento crítico, heterodoxo y no alineado con sus matrices teóricas conservadoras es desde siempre atacado por estos individuos anquilosados desde hace años.

Ya al terminar el año pasado tuvimos que enfrentarnos al mismo recorte de materias que pretendía imponer la Dirección de la Carrera. Sin embargo, producto de la organización democrática de estudiantes y docentes en la Asamblea Interclautros, movilizándonos una y otra vez a la Junta de carrera y al Consejo Directivo, logramos frenar la prepotencia radical y evitar que se eliminen materias optativas y seminarios.

En esta oportunidad, vuelven a avanzar sobre las materias críticas para imponer de hecho una sola perspectiva teórica en la currícula: el neoinstitucionalismo, con lo que logran su objetivo ideológico. Pero no lo hacen sólo por convicción ideológica conservadora. Eliminando las materias con contenidos críticos y aprobando solo las materias de docentes amigos "adictos de la institución", garantizan que la democrática fórmula (medieval) de Schuster y Mayer del voto ponderado, que implica que el voto de graduados y docentes vale 50 veces más que el de cualquier estudiante, siga existiendo.

Pero en esta etapa ya no todo resulta disfrazable: mientras el mundo económico y financiero se desmorona, donde el casino que representan las economías capitalistas desde siempre cuyas ganancias se privatizan y las pérdidas se socializan, se vuelve más irracional para miles, ante nuestros ojos y con sus maneras siempre antidemocráticas, el director y sus secuaces vuelven a atacar hacia el final de un año lectivo a las materias optativas de Bonnet (claro, se estudia teoría revolucionaria), de Filadoro (claro, se piensa en Marx, en la economía heterodoxa, en corrientes de pensamiento críticas y a lo mejor nos permite entender algo de la crisis en curso), y ahora agregan como blanco a Gruner (claro, en su materia se piensa en clave del marxismo occidental, autores "algo" más complejos que los Dahl, Lijphart, Sartori, Linz, Bobbio, politólogos "clásicos" -¿habrá leído el director y sus secuaces en alguna oportunidad a Benjamin, Adorno, Horkheimer, Lukacs? No, demasiado de izquierda para sus parámetros!)

Desde CoNtraTiempos – En Clave Roja (PTS e Independientes) insistimos, como ya lo hicimos el año pasado cuando enfrentamos a esta misma dirección de carrera, en que la manera de garantizar la pluralidad ideológica y la libertad de cátedra siempre atacada por la dupla Alternativa Académica - La Vallese / UES es impulsando que "materia que se presenta, materia que se aprueba". Sin embargo esta simple demanda es una utopía si siguen en el gobierno de nuestra carrera Mayer y su corte radical. Debemos organizarnos también para pelear por la democratización real de los órganos de gobierno, eliminando el voto ponderado de Schuster y estableciendo el criterio democrático de que cada persona sea igual a un voto, además de obtener mayoría estudiantil en los órganos de cogobierno. Solo así vamos a dejar de tener que resistir todos los años el mismo ataque y evitaremos que se perpetúe la camarilla radical en la dirección de nuestra carrera.
No podemos permitir que por criterios ideológicos y mecanismos "democráticos" medievales, las únicas materias críticas de nuestra carrera sean arrancadas de la currícula. Para avanzar en nuestras demandas se vuelve imprescindible democratizar los órganos de gobierno de la facultad en su conjunto, mediante el mecanismo de una persona = un voto, sin distinciones estamentales ni de castas.

Compañeros y compañeras, queremos ser claros en este punto: mientras haya voto ponderado, habrá juntas autoritarias como la actual (cuyo director obtuvo menos del 17% de los votos en estudiantes, el claustro mayoritario de la comunidad universitaria).

– Derrotemos el ataque a materias con contenido crítico. No permitamos que hagan de Ciencia Política una carrera de profesionales del asesoramiento a banqueros, empresarios y politiqueros de la irracionalidad capitalista.

– Defendamos nuestra posibilidad de pensar y estudiar críticamente. Por una carrera y una universidad que interprete la realidad y busque transformarla para poner nuestro conocimiento al servicio de resolver los problemas de las mayorías trabajadoras y populares.

– Refundemos la carrera, por una Ciencia Política de otra clase.

– Democratización ya de los órganos de cogobierno, fuera las camarillas radicales/alterinistas de Ciencia Política.

– Pluralidad Ideológica y cátedras paralelas en todos los horarios de cursada.

– Autoorganización y coordinación para imponer nuestras demandas.

– Por un movimiento estudiantil que se una a los trabajadores en las calles ante la crisis que van a querer descargar sobre el pueblo trabajador.

– POR UNA UNIVERSIDAD AL SERVICIO DE LOS TRABAJADORES Y EL PUEBLO, LUCHEMOS POR UNA VERDADERA UNIDAD OBRERO - ESTUDIANTIL

– BASTA DE UNA ARGENTINA PARA LOS PATRONES,
POR UN GOBIERNO DE LOS TRABAJADORES, SIN IMPERIALISTAS NI EXPLOTADORES.

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