El 26 de abril, el Senado aprobó la Ley de Cargos Específicos, que previamente había sido aprobada por diputados. Ésta, permite que el gobierno aplique aumentos a las tarifas de electricidad y gas, los cuales serían derivados a un fondo fiduciario1, para llevar adelante obras públicas de producción y distribución energética. Además no le fija ningún límite al gobierno en cuanto al monto a recaudar, ni la duración de dicho cargo y se puede aumentar el mismo.
Puede ser aplicado a los consumidores residenciales, ya que sólo fija un límite en general a los “pequeños usuarios”, sin determinar quiénes serían éstos. El único requisito para implementarlo es que haya un “proyecto aprobado”, es decir que el gobierno puede aprobar un proyecto y comenzar a recaudar, aún cuando el mismo no se comience a realizar, todo argentino sabe que entre la aprobación del proyecto, el comienzo de las obras y la finalización del mismo pueden transcurrir décadas, con lo cual el aumento lo pagaremos toda la vida. Para que se tenga en cuenta la envergadura de lo que se piensa recaudar por esta vía, ya hay proyectos por U$S 4.000 millones (el 45% de lo que se le pagó al FMI).
Hay que destacar también que no va haber ningún tipo de control por parte de las entidades de usuarios, ni siquiera del Congreso. El Gobierno dice que para eso está la Sindicatura General de La Nación, un buen chiste considerando que la maneja la esposa de De Vido.

Una ayudita para las privatizadas

De esta manera, Kirchner que cacareaba contra las privatizadas alegando que estas no invertían, no sólo les va a aumentar las tarifas como afirmábamos en el número anterior de La Verdad Obrera, sinó que además les garantiza que los argentinos les paguemos las obras de generación y distribución de energía, para que nos las puedan vender, algo así como pagarle el camión al sodero para nos pueda venir a vender la soda a la vez que le garantizamos que se la vamos a comprar por varias décadas. También cuentan con reducciones impositivas para las inversiones que realicen. Se podría decir que estas empresas imperialistas no sólo tienen la vaca atada (nosotros), sinó también la chancha, los 20 y la máquina de hacer chorizos.
Por su parte el Gobierno se asegura contar con miles de millones de dólares con los cuales comprar a Gobernadores, intendentes para asegurarse el poder.

1 Un fondo fiduciario, es una cuenta donde se acumula una suma de dinero con un fin específico, no puede ser usado para otra cosa.