El pasado 29 de mayo se realizaron las elecciones de la CTA Micheli. A una semana de las mismas todavía no se publicaron los resultados. Cuando la nueva-reelecta dirección de la CTA se digne a mostrarlos se podrá hacer un balance más claro de la elección. Lo que ya podemos afirmar y este mismo hecho lo demuestra es que fueron un fraude.

Después de las elecciones de 2010 se consuma la fractura entre Yasky y Micheli, una ruptura donde cada uno apoya a distintos proyectos patronales: el gobierno y la oposición sojera respectivamente. A partir de ésto se dividen los sindicatos entre una y otra y la decadencia es cada vez mayor. En ese marco, con su central reducida y en crisis, el michelismo dice que llegó a votar una mayor cantidad de trabajadores que las elecciones de 2010 y a horas de haber terminado la votación Micheli se dio rápidamente como triunfador con el 89% de los votos. En cientos de dependencias se pudo comprobar que la votación fue muchísimo más baja que en las ultimas elecciones, quedando claro que la gran mayoría de los trabajadores está por fuera de esta disputa entre Yasky y Micheli.

Se confirmó lo que denunciáramos: eran un fraude escandaloso. Nuestra decisión de no presentarnos y hacer una fuerte campaña de denuncia llamando a NO VOTAR, creemos que fue la mejor manera de fortalecer al clasismo, al no hacerse una lista unitaria que hubiese podido verdaderamente con fuerza plantear una alternativa antiburocrática y contra el fraude

Por eso hasta el mismo PO lo tiene que reconocer: “Desconocemos totalmente los guarismos emitidos por la lista 1 (lista michelista), puesto que son solo un dibujo que no refleja la realidad de la elección”. Dicho sea de paso, siendo parte de la junta electoral, no sacaron ni un solo comunicado denunciando los cientos de irregularidades que demostraban el fraude que preparaba el michelismo.

Lamentablemente, los compañeros de PO (lista 3 nacional) e incluso del Nuevo MAS (lista 5), terminaron legitimando estas elecciones presentándose sin hacer una sola denuncia contra el fraude.

Para nosotros, recuperar las organizaciones de los trabajadores de manos de la burocracia deberá hacerse fortaleciendo y llenando de trabajadores esas mismas organizaciones. Este es un debate que nos debemos todos los sectores antiburocráticos y combativos ¿o se priorizan cargos sindicales vacíos o se organiza a los trabajadores para la lucha fortaleciendo los sindicatos y arrancándoselos a la burocracia?