Las trabajadoras y trabajadores de HAS (High Assistance Service) vienen hace 7 meses exigiendo un aumento salarial del 30%, para no vivir a pan y fideos. Decenas de reuniones en el ministerio, varios paros con más de 10 conciliaciones obligatorias dictadas en forma irregular, y sin solución concreta para las trabajadoras y trabajadores. El gobierno de Cristina, por intermedio de la patronal camporista de Mariano Recalde, mantiene esta tercerizada que presta servicio operativo en el control de equipaje y asistencia al pasajero en Aerolíneas Argentinas en condiciones de trabajo totalmente precarias. La empresa HAS tiene una oscura historia: es propiedad del represor y ex Capitán de Navio Donda Rigel, ahora bajo su testaferro Bovero, ex comisario bonaerense. Es decir que estamos frente a una empresa manejada por una pandilla de milicos represores que supieron derramar sangre obrera y popular durante la dictadura.
Imagínense los métodos con los que se manejan con los empleados.

Organizadas mediante asamblea, las bases de HAS Aeroparque vienen exigiendo a UPADEP (Unión de personal Aeronáutico de Empresas Privadas) que acaten las decisiones democráticas de las asambleas de base cuyo planteo consiste en promover un plan de lucha serio y contundente por el 30% de aumento salarial, al tiempo que no cesan en su planteo de fondo por el pase planta permanete. Cansados ya de tanto manoseo los trabajadores recurren al paro por tiempo indeterminado con adhesión total en Ezeiza y Aeroparque. Con el fin de hacer escuchar el reclamo las asambleas en Aeroparque deciden salir a las calles cortando la Avenida Costanera. La represión llevada adelante por la Policía Federal no solo concitó el repudio de variados sectores sociales y políticos, también confirmó el giro cada vez más anti obrero del gobierno: cuando apenas faltan semana y media para el comienzo del juicio por el asesinato de Mariano Ferreyra, la Policía Federal desaloja violentamente a los trabajadores tercerizados, como fue el caso de los ferroviarios. El efecto de la represión y los palos sobre las compañeras y compañeros es el contrario al buscado por el gobierno. Las bases se reagrupan en el hall de Aeroparque, reafirman la continuidad del plan de lucha y allí mismo improvisan una conferencia de prensa repudiando la represión y dando cuenta de que la lucha y el paro siguen en pie. Ante la tenacidad y lucha de la bases, la empresa con el auspicio del Ministerio de Trabajo, retrocedió de sus leoninas propuestas iníciales, y el sindicato firmó un “pre acuerdo” sin consulta a las asambleas que vienen bancando la lucha y le pusieron el cuerpo a los palos de la Federal. Esta actitud burocrática del sindicato fue repudiada por los trabajadores que al cierre de esta edición se encontraban en plena deliberación.

Las trabajadoras y trabajadores de HAS necesitan la más amplia solidaridad de todas las organizaciones obreras, sociales, políticas y de derechos humanos. El mérito de la movilización en Aeroparque es haber puesto en el tapete y dejar bien en claro que las tercerizadas lejos de ser una mera herencia del pasado son parte misma del modelo K y están funcionando allí, donde el gobierno tiene total y absoluta injerencia como es el caso de Aerolíneas Argentinas. Es necesario transformar la simpatía que despierta en los trabajadores efectivos la lucha de los tercerizados en fuerza de lucha, unificando el conjunto de los reclamos de todos los aeronáuticos. La participación activa de los delegados de Lan Argentina es un ejemplo en tal sentido. Resulta necesario eliminar las tercerizadas, resaca menemista, conquistando el pase a planta permanente y un Convenio Unico de todos los aeronáuticos.