¿Que opinás sobre los hechos sucedidos en San Vicente?
Vemos que hay un reacomodamiento de la tropa, sobre todo de los sectores de la CGT, porque conociendo como opera el kirchnerismo se ha metido en cada una de las organizaciones y obliga a que cada uno se posicione para un lado y para el otro. Lo que pasó es parte de este reacomodamiento. Es un reacomodamiento en función de seguir manteniendo su lugar de privilegio y también en función de hacerle de rueda de auxilio al gobierno patronal de turno que es el kirchnerismo. Totalmente alejados de la función real que deberían asumir los sindicatos, que es ponerse a la cabeza de las luchas y trabajar en función de los intereses de los trabajadores. Pero están lejísimos de los intereses de los trabajadores. Hace ya muchos años que son un dique de contención para los reclamos que tenemos los trabajadores. Lo importante a destacar también es el método que utiliza la patota de la CGT con barrabravas de clubes, ya que estos métodos patoteriles son los que han utilizado para atacar a trabajadores en lucha.
 
¿Cómo superar la burocracia sindical y el peronismo?
Del otro lado de la balanza vemos con mucha expectativa, con mucho entusiasmo, que comienzan a haber nuevas conducciones, como por ejemplo los compañeros de Jabón Federal, del Hospital Francés, la lucha de los compañeros de Las Heras con cuerpos de delegados totalmente independientes, la lucha misma de Zanon y así tantas luchas se empiezan a ver nuevas dirigencias, nuevos dirigentes.
Lo importante es que estas nuevas conducciones tiene un método totalmente distinto a la burocracia de la CGT y la CTA. Decidir las cosas en asambleas, hacer un trabajo de abajo hacia arriba, de abrir discusiones y tomar decisiones ante cada una de las cuestiones importantes. Esta es una diferencia enorme que se tiene con la burocracia y abre una perspectiva distinta ya que todas estas nuevas conducciones han cortado el hilo que unía a los viejos dirigentes de la CGT y la CTA con el peronismo.
Por un lado, está lo que vimos en San Vicente de la vieja burocracia ligada al peronismo que siempre le ha jugado en contra a los trabajadores. Y por el otro, vemos con buenos ojos que empiezan a surgir comisiones internas, basadas en otra cosa totalmente diferente.