Se presentó la reunión con un tema central como eje para la discusión: la desocupación; y el gremio, que "no es representativo".
Allí se mostró documentación donde constan los desvíos que hace el gobierno de los fondos para la construcción: Se asignaron para la provincia 24 millones en el presupuesto 2002. Pero lo que está certificado allí es que desde enero a setiembre llegaron al FONAVI 13 millones para la construcción de las casas, pero que se gastaron sólo 3 millones. El "resto" obviamente, fue para los bolsillos del empresariado y los políticos del régimen.
En contra de las peleas internas entre las comisiones de la provincia, se reafirmaron dos objetivos: luchar por reactivar la obra pública y recuperar el gremio. En esta reunión - donde estuvieron representados prácticamente todos los departamentos de la provincia-, las intervenciones de los diferentes compañeros demostraron por un lado, el estado de parate total de las obras y la desesperación por la crítica situación de la familia obrera, además del descrédito y justo odio que se ha ganado la burocracia del gremio que encabeza Galián.

Pero tenemos que alertar que ahora el gobierno nacional está aprovechando el "veranito" económico y quiere salir con las elecciones. Los partidos patronales querrán utilizar a los trabajadores como base de maniobra para las elecciones, prometiendo a diestra y siniestra "reactivación" de las obras, trabajo o planes de 150 lecops directamente a cambio del voto.
El mismo Duhalde estuvo en Jujuy relanzando la obra de Paso de Jama; "relanzamiento" que cuenta hasta ahora con 70 trabajadores ocupados mientras -como se expresó en la reunión del 26-, los compañeros no tienen nada.
Es que el gobierno tiene un plan de "reactivación" que conspira directamente contra el salario obrero: la construcción de casas, con un fondo donde "el Estado aportaría los materiales para encarar nuevas construcciones, [y] la mano de obra provendría de los desocupados que cobran subsidios..." (Clarín, 26/10). Hasta piensan decir que el índice de desocupación bajó ¡Igual que el salario básico, que ahora será de miserables 150 lecops!
Lamentablemente, la refacción de algunas escuelas en la provincia -parte de este "plan reactivante"- es llevada adelante por desocupados, sin que sus organizaciones - CTA, CCC- abran la boca para nada frente a esta baja del salario.
Por una polItica obrera independiente

Como informa el mismo diario "...el índice de la actividad de la construcción tuvo una caída acumulada del 32,8% con respecto al 2001" (Clarín, 8/12). En el país hay un déficit de más de 3 millones de casas; en Jujuy emergen nuevos y más asentamientos: cientos de familias "sin techo".
Contra todo intento patronal de maniobrar, camino a las elecciones, contra todo intento de dividir a los trabajadores e imponerles un salario de miseria, hay que levantar una salida de fondo a la crisis: un verdadero Plan de Obras Públicas, bajo control obrero. Un plan que una a trabajadores de la construcción, desocupados y estatales con el objetivo de arrancar al gobierno el dinero para los sueldos (de $ 700) y materiales, para que ellos mismos decidan democráticamente en asambleas dónde se deben construir las casas, escuelas y hospitales para el pueblo pobre, evitando así, el manejo fraudulento de empresarios y políticos corruptos.
Los obreros de la UOCRA, si avanzan en la organización real de todos los trabajadores de la provincia, pueden recuperar su sindicato. Sólo si organizan la Comisión Provincial con mandatos revocables por asamblea (como hace la Comisión de Palpalá) y desarrollan un efectivo plan de lucha, podrán ser la alternativa que necesita la provincia. Con una política obrera independiente que dará un salida de fondo a todos los trabajadores y el pueblo.