logo PTS

Mundo Obrero

Pirelli: bronca y rebeldía

En Pirelli hace rato que la burocracia de Wasiejko no es bien recibida. Más bien, todo lo contrario. Desde un tiempo atrás, y aún más a partir del comienzo de esta lucha, producto del odio hacia la mayoría de los delegados y directivos de la seccional Merlo por tantas entregas, surgió un grupo importante de obreros activistas combativos.

Franco Villalba

4 de septiembre 2008

En Pirelli hace rato que la burocracia de Wasiejko no es bien recibida. Más bien, todo lo contrario. Desde un tiempo atrás, y aún más a partir del comienzo de esta lucha, producto del odio hacia la mayoría de los delegados y directivos de la seccional Merlo por tantas entregas, surgió un grupo importante de obreros activistas combativos. Ellos fueron los que se pusieron al frente de esta dura pelea y, en este caso, de preparar las fuerzas para llegar a la asamblea general. Varios festivales, la difusión del fondo de lucha, charlas en el acampe y cartas en cada cambio de turno, reuniones casi diarias entre los principales referentes de esta lucha, fueron construyendo una conciencia y una actividad seriamente planificadas, con el objetivo de tomar en sus manos la conducción del conflicto, para no dejarlas en las de la burocracia.
Son obreros de las barriadas del lejano y olvidado conurbano bonaerense, que con un promedio de 30 años destaparon su ira por tanto tiempo de humillación. Y hoy se esfuerzan día a día por transformar esa bronca en organización. Ellos siguen expandiendo las ideas y toman las conclusiones de esta nueva generación obrera que con poca experiencia, pero con mucha energía, salieron a pelear y construir sus propias organizaciones para la lucha, como también lo hicieron en la ex Jabón federal, Mafissa y Fate.

Por eso llegaron con energía y coordinación a la asamblea general. Por eso alzaron su mano todos unidos, a la vez, y totalmente convencidos para aprobar la moción de seguir defendiendo a los compañeros despedidos como prioridad ante el tema salarial. Por eso, luego de perder en la votación en la asamblea general, volvieron a la fábrica con bronca pero mirando para adelante y con orgullo de la pelea que dieron. Esto explica porque al final del día, los combativos obreros de Pirelli, coparon el local del Sutna Merlo para pudrirle el asado a la directiva, golpeándolos con las mismas manos con las que antes votaron la defensa de sus amigos. Desde allí salieron luego para garantizar con piquetes: que nadie entre a trabajar hasta el día siguiente, que no se hagan horas extras, que no entre ni salga un solo camión. De esta manera trasmitieron al resto de sus compañeros que pese a todo siguen con la moral alta.

No se rinden, ni piensan hacerlo. Ya están pensando como seguirla. Hasta volvieron a ir a Fate para llevar sus propuestas. Desde el interior de la fábrica son cada vez mas las anécdotas que llegan a la carpa de los despedidos, contando como desde adentro hacen el aguante.

A pesar del resultado de la asamblea… ¡Pirelli no se rinde!

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: