Pese a los anuncios del Gobierno para reactivar con créditos la industria automotriz, el día viernes 27 se produjeron despidos masivos en la autopartista LEAR de Pacheco, provincia de Buenos Aires, mientras siguen las suspensiones de un tercio de la planta, con el agravante que desde la semana pasada y por el término de treinta días los trabajadores suspendidos no cobrarán ningún tipo de remuneración.

Esta situación se da pese a que en Ford, que es la única compradora de los mazos de cables que produce LEAR, la producción no bajó durante este año y se espera una suba desde el mes de julio. Sucede que la empresa Ford está importando parte de la producción de los cables que produce LEAR desde Centroamérica y Europa, mientras en la planta de Pacheco se producen despidos y doscientos trabajadores se encuentran suspendidos y sin goce de sueldo ni pago dinerario alguno. De esta manera, hay trabajadores en la calle despedidos y suspendidos mientras un monopolio estadounidense trae el mismo material desde otros países perjudicando no solo a los trabajadores, sino las cuentas públicas. Todo esto se hace con la inevitable complacencia de los funcionarios del Estado.

En el colmo del cinismo esta empresa norteamericana despidió a los trabajadores acusándolos de tener "bajo rendimiento", cuando son en su mayoría obreros de años de antigüedad y es la misma empresa la que tiene al 30 % de los obreros sin trabajar.

En relación a las suspensiones, el Ministerio de Trabajo, en un dictamen del 2 de junio pasado, ya había adelantado que estas suspensiones eran ilegales porque la empresa jamás denunció la existencia de crisis, como indica la ley, como paso previo a la suspensión masiva. También planteó que de acuerdo a la ley la empresa debería dejarlas sin efecto, pero no la intimó para que cumpla con la resolución. Lo mismo hizo el SMATA, que hasta ahora no realizó la denuncia frente a la autoridad competente, lo cual también haría caer las suspensiones ilegales.

Si hoy existen estas suspensiones se debe a esta situación totalmente irregular, ahora agravada por los despidos, que tampoco fueron precedidos por la denuncia de la existencia de una crisis de la empresa. Esto es así ya que LEAR jamás podría demostrar crisis alguna, porque a nivel mundial facturó el año pasado más de dieciséis mil millones de dólares.

Frente a esta situación exigimos la reincorporación inmediata de todos los despedidos y el fin de las suspensiones sin pago. Llamamos a todos los sectores solidarios a acompañarnos en esta lucha.

Comisión Interna y trabajadores de Lear

Contacto:

Ruben Matu, delegado: 15-5141-1868

Silvio Fanti, delegado: 15-6803-9888