En el escenario de las primarias en Capital hubo desplazamientos esperables. La fórmula de Cristina Kirchner llegó al 30%, sumando 3 puntos al 27% que obtuvo Filmus en las elecciones del 10 de julio. Por su parte, el 47% de los votos del macrismo se repartió entre las candidaturas de Eduardo Duhalde (22%), la de Rodríguez Saa (11%), Alfonsín (10%), en los escasos 2 puntos que subió la Coalición Cívica de Carrió y en el discreto avance del gobierno nacional.

Pero los dos hechos más destacados de la contienda fueron, sin dudas, la derrota de Proyecto Sur que pasó de un 13% al 1.6% de los votos, y cuyo destinatario central fue la candidatura de Hermes Binner (14%) y la gran elección que hizo el FIT con más del 4% de los votos.

En un marco en el que se combinan tendencias conservadoras con volatilidad electoral en las amplias masas y a diferencia del 10 de julio, en esta oportunidad, los que votaron por Luis Zamora, una franja del electorado de Solanas y sectores que apoyaron a Filmus, optaron por apoyar el gran combate contra la reforma política proscriptiva que libró el FIT y que logró conquistar el apoyo democrático de un sector de los trabajadores, de la juventud y la intelectualidad.

Pino Solanas: una capitulación que tuvo costos

Si en las pasadas elecciones Pino Solanas, en su intento de mostrarse moderado y confiable ante la base social del macrismo y la “corpo” terminó adoptando parte de la agenda del “orden” en las primarias, Proyecto Sur avaló con su silencio la proscripción. Sin Pino, sin militancia, y con una campaña intrascendente, los dirigentes de este desgranado espacio se negaron a combatir la traba proscriptiva del régimen y pasaron raspando el piso del 1.5%. Ahora, en medio de “fuegos cruzados”, Pino arremete contra sus ex-socios del Frente Amplio Progresista, acusando en especial a Víctor De Gennaro de “monje negro” y a los dirigentes del socialismo y el GEN –el espacio de Stolbizer- de ultimatistas por imponerle las candidaturas. Como en todo debate entre oportunistas de la misma calaña, se cuelan verdades: “En el 2008 estaban con Kirchner, en el 2009 con Sabbatella, en el 2010 con Proyecto Sur y en el 2011 con los socialistas. ¿Dónde estarán en el 2012?”. Por nuestra parte, por un problema de espacio, nos ahorraremos la rica trayectoria del cineasta que en sus años mozos fue peronista, en 2008 apoyaba a la Mesa de Enlace y en el 2011 a la Metropolitana. La impotencia de esta fuerza política en franca decadencia es a su vez, un duro golpe al oportunismo desenfrenado del MST y a sus socios del PCR.

La gran campaña del FIT

Ante la defección de la centroizquierda, pasar el piso proscriptivo se transformó en la Capital en “causa” de amplios sectores progresistas y democráticos. Cientos de intelectuales, artistas, comunicadores, se transformaron en protagonistas de la campaña en apoyo al FIT.
A la gran militancia con la que cuenta el Frente en Capital se sumaron delegados independientes de establecimientos y Juntas Internas como la del INCAA, agrupaciones estudiantiles como La Martedí, PRISMA, MIR, CAUCE o el Grupo de apoyo al FIT (entre otras) que dieron su apoyo y comisiones de mujeres como la del Indec. Cientos de compañeros en las principales concentraciones de trabajadores de la Capital como el Subte, telefónicos, aeronáuticos, docentes, estatales, de hospitales, obreros de la alimentación, de la UOM fueron activos militantes de nuestra campaña.

En la universidad, en la última semana cuando comenzaron las clases, nuestros jóvenes recorrieron las facultades y abrieron un importante debate sobre el intento proscriptivo a la izquierda. Por eso, también entre nuestros votantes estuvieron los jóvenes estudiantes que protagonizaron el proceso de luchas del 2010, los docentes y estatales que pelean por la salud y la educación, significativas franjas de trabajadores de los principales servicios, entre los que nuestros compañeros Claudio Dellecarbonara del subte, Carlos Artacho delegado telefónico, la compañera Ana Laura de la Junta Interna del Indec, Myriam Bregman, luchadora consecuente contra los genocidas y la represión, como tantos otros, son referentes de la izquierda que está presente e impulsa los principales combates de los trabajadores, los estudiantes y los sectores populares. Como los compañeros Jesica Calcagno, Patricio del Corro y Juan Oribe, recientemente absueltos, referentes estudiantiles, que junto a miles de jóvenes se solidarizaron activamente con la lucha histórica de los obreros/as de la Kraft-Terrabusi.

Desde el PTS y mientras nos preparamos para el nuevo capítulo de la contienda electoral de octubre, pondremos toda nuestra creatividad y energía al servicio de continuar con la construcción de una izquierda revolucionaria, entre los trabajadores y la juventud combativa, una fuerza militante que se prepara para influir decisivamente en los próximos actos de la lucha de clases