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Informaciones Obreras

LA INTERVENCION IMPUGNA

En el Indec quieren desconocer la nueva junta interna de ATE

11 de octubre 2007

El martes 9 los trabajadores elegimos la nueva junta interna, para seguir enfrentando la intervención del gobierno de K en el Indec. La fracción de la lista verde que apoyó la intervención de la mano del ahora ex Director Alejandro Barrios y encabezada por Nely Turlione, no se pudo presentar, lo que evidenció una señal de debilidad de su parte.
Así, se produjo la ratificación de la lista a través del voto de 240 compañeros afiliados, el 75% del padrón real. Fue un gran aporte, los más de cien compañeros que sin estar afiliados dejaron su adhesión a la lista y que garantizaron una importante participación de los trabajadores, más allá de su afiliación o no.

Como decíamos en la nota anterior (LVO 254), la junta interna “Carlos Fuentealba” es un frente unitario para enfrentar la intervención, en el que se expresan las distintas tendencias sindicales: la verde, la verde y negra, la marrón y compañeros independientes. La junta electa mantiene un acuerdo básico alcanzado entre sus integrantes que establece la expresión de mayoría y minoría y la libertad de tendencias, en los que la asamblea general debe ser órgano supremo. Esto es “lo nuevo” que desde La Marrón queremos defender.

Por eso, no extraña que la Directora que está llevando a cabo cada uno de los atropellos contra los trabajadores del organismo, haya presentado en el Ministerio de Trabajo un pedido de impugnación de compañeros de la lista, por su condición de contratados o por estar sumariados en causas inventadas por ella misma, para amedrentar nuestra lucha. Además de querer impugnar a la lista por la cantidad de miembros. Paradójicamente la Directora Edwin, la que entre otras cosas está imputada penalmente por la manipulación de datos del IndeK, y que a pesar de todo el Gobierno la nombró como Directora, es la que ahora pretende ilegalizar la organización de los trabajadores. Debemos denunciar este nuevo atropello patronal y pelear para que sea reconocida la Junta Interna.

Denunciemos los atropellos

Desde la Marrón venimos diciendo que, desde que existe la comisión conformada entre el Gobierno y ATE-CTA, la dirección siguió avanzando. La intervención continúa con la manipulación de los datos estadísticos de cada índice que necesita K para ocultar la realidad, como denunciamos los trabajadores. Para ello siguen los sumarios como represalias y no han retrocedido con los desplazamientos de compañeros. A la vez que necesitan dividir a los trabajadores, por eso están disponiendo del uso discresional de dinero en horas extras y “censales”, para comprar la voluntad de algunos compañeros y generar división. Relacionado a lo anterior, la dirección y UPCN están imponiendo el pase a dedo a la Resolución 48 (una esecie de planta transitoria) previa afiliación a ese gremio. Así UPCN cumple el rol de una “agencia laboral” del Gobierno, metiendo a sus matones y a nuevo personal.

La comisión, evidentemente es para entretenernos, por eso tenemos que hacer público cada uno de estos hechos. Resulta indispensable una conferencia de prensa en la que hablen los dirigentes de ATE-CTA que intervienen en la negociación con el gobierno haciendo estas denuncias, como ya lo venimos haciendo los trabajadores.

Organizar a los trabajadores

Contra todo este panorama, el desafío de la nueva junta interna es promover la organización de los compañeros; y eso sólo se puede llevar adelante unificando los reclamos. Por eso es clave promover las asambleas por piso y sector que se elijan delegados y, así, se fortalezca la asamblea general.

Para terminar con estas injusticias necesitamos establecer una nueva estructura en la que todos los trabajadores pertenezcamos a una planta única. Para que no haya más contratados y todos seamos de planta permanente. Mientras tanto, los contratados deben pasar a la Resolución 48, sin rebajas salariales y respetando la antigüedad. A su vez, se tiene que terminar el uso indiscriminado del dinero por parte de las direcciones que generan más división entre los trabajadores, por eso tiene que haber un reparto equitativo de las horas extras y censales en la que el piso salarial en el indec sea acorde al valor de la canasta familiar.

Prensa

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