El paro y movilización convocada por la CONADU (H) a la que adhieren la FUBA y distintos centros de estudiantes de la UBA se dan en el marco de una gran crisis nacional donde las clases dominantes del campo y la ciudad (las mismas que fueron a golpear las puertas de los cuarteles en los 70‘ y que vienen acumulando grandes fortunas con el modelo de los Kirchner) se pelean para ver quien tiene mas plata acumulada cuando la crisis financiera internacional en curso empiece a golpear mas duro sobre Argentina.

Desde En Clave ROJA planteamos que no hay que estar ni con la oligarquía de la Sociedad Rural que no quiere las retenciones para seguir acumulando fortunas en sus bolsillos, ni con el Gobierno, que nuevamente nos muestra que su hipocresía no tiene límites. La suba de las retenciones no está destinada a mejorar la «distribución de la riqueza», ni para aumentar el presupuesto de la salud pública o la educación. Prueba de ello es esta marcha que pone al desnudo los miserables salarios de los trabajadores docentes, denuncia la situación de los ad honorem, pone al descubierto la falta de infraestructura de la universidad pública como la falta de gas en la Facutlad de Medicina, el cierre del CBC Merlo por el intendente K Othacehe o el nunca llegado edificio único para Sociales.

La explicación de esto es que, al revés de lo que dice Cristina, los millones de dólares que recaudó el Estado nacional desde que asumieron los Kirchner fueron usados para pagar deuda externa, cooptar intendentes y gobernadores o subsidiar a los grandes empresarios que se llevan millones.

Los estudiantes tenemos que intervenir en la crisis de forma independiente de las camarillas radicales, los burócratas K y los «cuatro decanos»

En estos días pudimos ver como el bloque de los «cuatro decanos» progres (Schuster, Trinchero, Sorín y Aliaga) mostraron su apoyo a la politica K de «redistibuir la riqueza», mediante solicitadas y conferencias de prensa, ocultando escandalosamente que las millonarias retenciones agrarias que toma el gobierno no se usan ni en un ínfimo porcentaje para solucionar la paupérrima situación de la UBA. Nos preguntamos cómo Shsuter va a luchar por presupuesto para Sociales si compra el doble diskurso del gobierno. Estos sectores son los que pretenden sumar a la universidad al «proyecto nacional» K, mientras nos hablan de «repensar» el «rol social» de la universidad, en los hechos sobran ejemplos de una universidad atada a los intereses de los capitalistas, como en la Facultad de Agronomía sus proyectos científicos están diseñados en pos de profundizar la «sojizacion» del campo que favorece a los grandes terratenientes exportadores, o en Ingeniería con la firma de convenios con multinacionales como Techint. El movimiento estudiantil nada tiene que hacer en esta crisis junto a los que ahogan a la universidad con un miserable presupuesto y que en busca de una supuesta «funcionalidad social» la atan a los intereses de las grandes corporaciones del campo y de la ciudad.

A su vez la crisis ha mostrado la parálisis de la FUBA. Desde En Clave ROJA venimos denunciando desde hace años la equivocada política del Partido Obrero de hacer frentes políticos con corrientes como el PCR y el MST que, en esta crisis nacional han ido junto a Cecilia Pando y los «vecinos» de Recoleta, Barrio Norte y Olivos en apoyo al reaccionario paro del campo dirigido por la Sociedad Rural.

Incluso se han arrogado la representanción del Centro de Estudiantes de Filosofía y Letras, llevandolo al cacerolazo de Acoyte y Rivadavia, lo que fue criticado por En Clave Roja y numerosos estudiantes de la facultad. Esta crisis pone de manifiesto la necesidad de intervenir de manera independendiente de las camarillas universitarias, y luchar por una FUBA militante, democrática y que luche en las calles junto a los trabajadores. En este sentido llamamos a la conduccion de la FUBA a reveer su posicion ante esta crisis nacional y abrir un gran debate de cara al movimiento estudiantil sobre que postura tomar desde la Federacion.

Preparémonos para enfrentar la reforma kirchnerista de la Ley de Educación Superior. Por una universidad al servicio de los trabajadores y el pueblo y No de la empresas del campo y la ciudad.

Así como el gobierno no quiere las retenciones para mejorar la situación de la universidad pública, tampoco podemos esperar nada bueno de la anunciada reforma de la Ley de Educación Superior.

Cristina, bajo la demagogia de mantener la gratuidad de la carrera de grado, no sólo tiene en mente mantener todo lo nefasto de la ley menemista (como los posgrados pagos o los convenios con empresas donde los estudiantes trabajamos como mano de obra barata), sino que busca profundizar la injerencia de las empresas en la universidad. Ya Néstor Kirchner se los adelantó a los Jóvenes K en sus paquetas oficinas de Puerto Madero, quienes a la salida de la reunión declararon estar «preocupados» en reorientar una universidad que permita una «mejor» articulación entre los «jóvenes empresarios» y los universitarios. A estos jóvenes empresarios los conocemos: Curi hijo, que hoy despide a más de 100 obreros en Mafissa siguiendo la tradición de su padre que en los ´70 hizo desaparecer a 15 obreros; Cristóbal López, que apoyado en la Prefectura de Febres reprimió casi una decena de veces a los trabajadores del Casino y despidió a más de 400; Eskenazi, que se prepara para hacer fabulosos negocios con la privatizada Repsol-YPF, etc, etc, etc. Son los hijos de la misma clase que en los ´70 planificó y ejecutó un genocidio para mantener su dominación y aumentar sus ganancias a costa de la explotación obrera. Contra ellos debemos luchar por una universidad al servicio de los trabajadores y el pueblo.

¡Que el Congreso que votó la LES y la Ley Antiterrorista no decida por nosotros!

Toda la discusión de la reforma de la Ley de Educación Superior se va a resolver a espaldas de la comunidad universitaria en el Congreso Nacional. Nada bueno puede venir de este Congreso que hace unos meses a pedido de Kirchner votó la «Ley Antiterrorista» de Bush. La única forma de terminar con una universidad atada a los intereses de los grandes empresarios, es poner en pie un Congreso Universitario Nacional con mayoría estudiantil, claustro único docentes y voz y voto para los no docentes, abierto a las organizaciones de los trabajadores, que establezca salario para todos los docentes y no docentes acorde a la canasta familiar, la democratización de la universidad, condiciones edilicias y que comience el camino de construir una universidad al servicio de las necesidades de los trabajadores y el pueblo pobre.

EnClaveROJA (PTS e Independientes)

De la crítica a la universidad de clases, al cuestionamiento de la sociedad de clases