Otra vez la patronal, encarnada en el gobierno, torpemente subestima la unidad de los trabajadores. El 29 de Junio me despiden con una causa inventada argumentando mi ausencia en el sector. En esos momentos realizábamos una asamblea donde se denunciaban manejos poco claros con el dinero. La respuesta de los compañeros no se hizo esperar: respondieron que el despido era una clara persecución gremial y exigía la reincorporación ya.
La intervención, con el Dr. Salvatierra (Superintendencia de Servicios de Salud) y sus colaboradores, no cejó esfuerzos en frenar la movilización mediante circulares internas intimidatorias, llegando a despedir a tres compañeros más la semana siguiente.
El día 4 de Julio, ante la repercusión pública por un acto programado en apoyo a los despedidos en el que participarían distintas organizaciones sindicales, desocupados y agrupaciones políticas, se firma un acuerdo en el cual nos reincorporan, pero a cambio de realizar una asamblea en la que se defina si los compañeros aceptaban un acuerdo de paz social en el Ministerio de Trabajo. El objetivo de la intervención era ponernos una mordaza, en el marco que adeudan aportes y salarios de más de un mes y no contamos con ART.
El martes 11 de julio se realizó una asamblea en la que se decretó no firmar la paz social en estas condiciones, que la intervención desvincule al Dr. Altamirano por manejos oscuros en las cobranzas a nuestros pacientes con una comercializadora fantasma y seguir exigiendo un plan de fondo.
Los trabajadores del Francés seguimos demostrando que con conciencia, unidad y organización no hay cucos en la lucha de los trabajadores. Por esto saludamos a todos los trabajadores en lucha y los instamos a no bajar los brazos y decirles que la lucha y la conciencia es algo por lo que vale la pena seguir. No tengan miedo de contar con apoyo externo ya que la lucha de los trabajadores es una y el triunfo de uno es el triunfo de todos.