La conducción de UEPC se vio obligada a adherir al paro de CTERA pero se negó a movilizar para “acatar” la Conciliación que dictó su compañero Omar Dragún, flamante ministro de Trabajo y Secretario General de la CGT (que la conducción Celeste de UEPC integra).
 
A la conciliación la derrotamos en la calle

Lo que comenzamos el viernes 2 transformando las asambleas escolares en zonales con cortes de calle en distintos puntos de la ciudad, lo profundizamos el lunes 6 cuando más de 2.000 docentes marchamos tomando en nuestras manos el plan de lucha mandatado en las escuelas. Esta movilización fue una contundente acción independiente de la burocracia, que se negó a convocarla pese a que fue votada por una masiva asamblea de delegados de Capital. Decenas de pancartas, banderas de escuelas y asambleas zonales mostraban la bronca por el techo salarial y contra el burdo ataque a la docencia de Cristina.

Además de la burocracia Celeste, la otra gran ausente fue la Naranja juecista (que hegemoniza la lista Pluricolor), que vuelve a jugar el mismo papel que en 2009, negándose a participar de las acciones de lucha no avaladas por la conducción.
 
Mal momento para la burocracia K 

Logramos que no nos impongan el aumento miserable en 4 cuotas que pretendían la conducción y su amigo Grahovac. Quisieron reubicarse con declaraciones lamentables para “zafar” del indefendible discurso de Cristina. Ahora intentan firmar un aumento de 25% en 2 cuotas.

Hay que seguir fortaleciendo las asambleas zonales, sumando docentes para impulsar una nueva movilización unitaria con los trabajadores de la salud que siguen en lucha. Desde la agrupación D-BASE-PTS participamos de asambleas en hospitales planteando la coordinación y la movilización conjunta.