Telefónica y Telecom se agarran de un acuerdo con FOESITRA (la federación nacional dirigida por la burocracia de los gordos) de aumentar sólo $100 a los convencionados y nada a los pasantes. Con esto buscan presionar a FOETRA BS AS ya que nuestra demanda votada en asambleas en todos los edificios, es de $500 y $200 para los pasantes.
Es indignante que en medio de la difusión de las enormes ganancias logradas por estas empresas en el primer semestre del año, en las que se indica que ganaron lo mismo que en un año en la década pasada, se nieguen a hacer efectivas nuestras legítimas demandas. La sed de ganancias de estos monopolios es inagotable, por eso la lucha de los trabajadores tiene que ser dura y apostar a juntar la mayor cantidad de fuerza para lograr sus objetivos.
En asambleas que se realizaron en todos los edificios, decidimos continuar el plan de lucha con paros parciales de dos horas con cortes de calles en los principales edificios -tanto de Telefónica como en Telecom-, los días 13 y 15 de agosto. El día 21, al mantenerse la negativa empresarial, endurecimos las acciones con el estado de asamblea permanente por tiempo indeterminado en todo el gremio, es decir con el paro.
La participación en las medidas fue impresionante: superó el 95% de adhesión y con ellas, siguió fortaleciéndose un hecho novedoso enorme: la unificación como una sola fuerza, de los pasantes y contratados con los efectivos, que durante años fuimos divididos por estas patronales. Además otro hecho muy importante fue que en mucho edificios los trabajadores nos dimos un debate y vimos la necesidad de unificarnos con los usuarios y luchar juntos contra las empresas privatizadas y su política de salarios de hambre y aumento de tarifas, cuestión que no fue incluida por la dirección de FOETRA BS AS en el plan de lucha. En varios edificios hubo iniciativas de los trabajadores para unificarse con los usuarios, desde canciones contra el tarifazo, volantes y carteles planteando el no aumento de tarifas, como los que hicieron los compañeros del edificio Costanera, las declaraciones de los pasantes del edificio Piedras, hasta el acercamiento que hicieron los trabajadores del edificio Vernet a los usuarios que estaban haciendo cola en la oficina comercial que estaba cerrada por el paro y el corte de calles, para explicarles las razones de nuestra lucha, plantearles que nos apoyen e invitarlos a luchar juntos. Allí conseguimos el apoyo de todos, expresado en aplausos, a pesar de la demora enorme que les significó la medida.
Otro de los casos fue la unificación entre los distintos edificios de zona sur, donde también un grupo de compañeros se acercó hasta la puerta de la comercial. Esto es enormemente progresivo porque demuestra que hay muchos trabajadores que ven la necesidad de superar las barreras gremiales de la lucha corporativa y de unificarse con otros sectores.
Luego de 48 hs. de paralización total del servicio telefónico llegó la conciliación obligatoria, que fue acatada por la dirección de FOETRA BS AS. Ahora habrá 15 días de plazo para llegar a un acuerdo. Pero a las empresas les conviene jugar al desgaste de la lucha de los trabajadores y como no está asegurado un acuerdo aceptable, en estos días no tenemos que dormirnos. Tenemos que prepararnos para salir a luchar con medidas más fuertes si es necesario. Sabemos muy bien que la conciliación dictada por el ministerio y pedida por las patronales, es una maniobra para sacar a los trabajadores de la lucha y enfriar el gran proceso de acatamiento cercano al 100%. No podemos seguir esperando los tiempos de las empresas.
Esta lucha hay que transformarla en una causa nacional contra estas privatizadas.
Imaginemos si la dirección de FOETRA llamara públicamente los trabajadores y usuarios a levantar una bandera común por la recomposición salarial y contra el aumento de las tarifas. Sería la mejor forma de levantar una lucha a la altura de las necesidades de los trabajadores y el pueblo. Desde las bases debemos levantar estas consignas exigiendo que lo tome la conducción. También podemos aprovechar este plazo para relacionarnos con otros sectores de trabajadores que están luchando por lo mismo y unificarnos, como el ejemplo de un grupo de trabajadores de subte que nos vinieron a apoyar al corte de calles del edificio VERNET de Telefónica.
La coordinación de los trabajadores y usuarios no debe ser sólo para recuperar conquistas o enfrentar ataques, sino que abre la discusión de comenzar a discutir la estatización bajo el control de los trabajadores y el pueblo de las empresas privatizadas.