(POMPEYA) Los trabajadores de Coca Cola (Femsa) denuncian los despidos y persecuciones de que son objeto por parte de esta patronal mexicana. Hace unos meses en la planta de Loma Hermosa fue despedido Carlos Serrizuela por postularse como candidato contra los delegados del sindicato. En la planta de Pompeya, la más grande del país, durante 14 años no hubo ni sindicato, ni afiliados, ni comisión interna ni delegados de sector. Pero este año la bronca estalló, comenzó una incipiente organización y debió ser reconocida una comisión normalizadora de 6 trabajadores. Sin embargo la patronal siguió con la persecución. Semanas atrás despidió a Ariel Castello, por una causa inventada, siendo que el compañero era uno de los que estaba organizándose para que hubiera delegados en toda la planta. Por el mismo motivo, Omar Rombolá fue trasladado y pese a que la justicia ordenó que fuera restituido a su lugar de trabajo, la patronal lo mantiene afuera y sin asignarle tarea alguna. Los compañeros han iniciado una campaña por su reincorporación y contra la persecución y práctica antisindical de esta patronal negrera.