La patronal de Cerámica Neuquén sigue provocando a los obreros. Luego del combativo piquete en la ruta 7 frente a la fábrica el jueves 24/5, el gobierno se vio obligado a intimar a la patronal a hacerse presente a una audiencia el miércoles 30. Por primera vez el dueño Villafranca se hizo presente, pero para decir lo mismo que sus abogados: si el gobierno no les da un crédito no van a pagar los sueldos, premios y vacaciones a los trabajadores. Los obreros rechazaron de plano esta provocación, y propusieron vender el stock de cerámicos para cobrar la deuda. La patronal dijo que otra opción era que les dejen sacar los cerámicos para venderlos ellos, y sin comprometerse a reabrir la fábrica. Sin ninguna confianza en sus palabras, los obreros mantuvieron su propuesta de vender ellos el stock, pero sin levantar las medidas de lucha hasta que no haya una respuesta de fondo.
Como contó Pablo Bunajul, uno de los delegados de la CI que participó de la reunión con obreros de base, “hablaron compañeros con más de 30 años y expresaron su indignación con llantos de bronca por sentirse desilusionados de que después de llenarle los bolsillos los quieran dejar en la calle”.

Mientras transcurría la reunión con la patronal, los obreros nuevamente cortaban la ruta 7 frente a Cerámica Neuquén, mostrando a estos empresarios y al gobierno que los ceramistas no bajan los brazos y no van a dejar que despidan a 140 trabajadores.
Terminada la reunión se levantó el piquete y realizaron una asamblea en los portones de la fábrica. Gustavo Cáceres, obrero de la Cerámica Neuquén, contaba después de la asamblea, a la que calificó de “histórica”: “hubieron 2 mociones en la asamblea: una, que los obreros vendan el material y que se forme una comisión de ventas. La otra, aceptar la propuesta de la patronal que es que ellos vendan el material y nos paguen. A favor de hacer la comisión obrera de ventas para vender el material, la votación fue unánime y se rechazó la propuesta de la patronal”
Los obreros de Cerámica Neuquén muestran su determinación para defender los puestos de trabajo. Y como demostró el acto del 1° de mayo en las puertas de la fábrica, no están solos. En ese acto, el delegado Pablo Bunajul fue claro y expresó la decisión de los trabajadores: “Con o sin patrón, los obreros vamos a defender nuestros puestos de trabajo”.