En la nota “Más trabajo y menos plata” del LVO N° 222 veíamos cómo, aún los trabajadores que habían logrado mantener el poder adquisitivo que tenían antes de la devaluación, producían mucho más y se quedaban con una parte menor de la producción. Esto también se refleja en las ganancias empresarias y en lo que le cuesta a las patronales pagar los salarios de los trabajadores.
 
Los sueldos en las 500 grandes empresas
Los trabajadores que han conseguido mantener su poder adquisitivo son centralmente los de las grandes empresas. Estas pagaban en 2005 un promedio de $2.7621 mensuales, es decir, apenas por arriba de los $2.400 de la canasta familiar. En 2001 el salario promedio pagado por estas empresas era de $1660. Es decir que los salarios en estas empresas aumentaron un 66%, por debajo del 73% de inflación2.
 
Aumentan las ganancias y la producción, y los trabajadores reciben menos
Pero una de las cuestiones más relevantes es la relación entre el valor de la producción y los salarios. En el 2001 estas empresas pagaban a los trabajadores $12 por cada $100 que producían. En 2005 sólo pagaron $6,70. Esto significa que a las empresas les resulta cada vez más fácil y barato pagar a sus trabajadores. Y que sus ganancias van aumentando. Al aumentar la producción tienen mucha más plata para pagar los salarios, que aumentan, pero menos. Esto implica que el costo salarial de los empresarios es cada vez menor.
Incluso si hubiesen seguido pagando los $12 por cada $100 de producción, sus ganancias hubiesen seguido aumentando: en lugar de 38.000 millones, hubiesen ganado 22.000 millones, que son 24 veces lo que ganaron en 2001. 
Por eso, culpar a los salarios de la inflación no es más que un verso. Los aumentos de precios, los empresarios se los cargan a los pequeños comerciantes y a los consumidores (es decir, entre otros, a los propios obreros). 
 
Acabar con la explotación
La pelea por los aumentos de salarios es necesaria para que las necesidades elementales de los trabajadores sean satisfechas. Desde el peor momento de la crisis hasta ahora, los trabajadores recibimos muy poco. Centralmente se dedicaron a recuperar lo perdido por la inflación. Y con un crecimiento económico que no se daba en décadas, todavía no pudimos siquiera recuperar el nivel salarial de los ‘90. Por eso es necesario pelear por un aumento superior a la inflación. Pero hay que saber que todo aumento salarial es pasajero y no acaba con la explotación. Por eso es necesario acabar con este sistema de explotación del trabajo asalariado.
 
1 Datos sacados de la Encuesta de Grandes Empresas del INDEC.
2 Según el IPC elaborado por el INDEC.