Mientras el nuevo rector de la UBA, Rubén Hallú, preparaba la conferencia de prensa en la que cínicamente manifestó “sorpresa” por la crisis presupuestaria de la UBA, y por la cantidad de docentes ad honorem, cuestiones que las organizaciones estudiantiles y docentes denunciamos y enfrentamos desde hace años, uno de sus lugartenientes, el decano de Ingeniería Carlos Rosito, perpetraba un ataque contra el centro de esa facultad, conducido por las corrientes de izquierda PCR y Partido Obrero. Utilizando como excusa un fuerte déficit de la secretaría de apuntes del centro1, Rosito desmanteló el local de apuntes, revocó las concesiones al centro, y se aprestaría a privatizar este servicio, dejando en la calle a casi 40 trabajadores. Desde aquí llamamos a derrotar este ataque reaccionario y privatista, que viola la autonomía del centro de estudiantes, y que es una respuesta a las organizaciones que nos movilizamos y enfrentamos el “pacto de olivos” de las camarillas profesorales que puso a Hallú como rector.

Rosito, Techint…
El ingeniero Rosito, en un extenso Currículum Vitae que incluye haber sido empleado de su familia amiga Rocca en Siderar, cuenta además con un poco honroso “hito”. Fue el impulsor de un“golpe de estado” en Ingeniería, cuando apoyado por la camarilla de profesores, y tras bambalinas por el emporio Techint, volteó a Bruno Cernuschi Frías, quien se opuso a avalar negociados con este grupo económico, y coqueteó con un discurso independiente, apoyándose en la CEPA y el PO, lo que pagó con su destitución. Ingeniería es tal vez la facultad de la UBA en la que más lejos ha ido la política de subordinar su estructura y sus planes de estudio a los intereses de las empresas capitalistas, en particular a la “mimada K” de la siderurgia. “Programa educativo Roberto Rocca”, visitas guiadas a Acindar o Siderca, son algunas de las “ofertas” que tiene la facultad de Ingeniería bajo la gestión Rosito. Cuando desde En Clave ROJA y el movimiento estudiantil enfrentamos a las camarillas, no lo hacemos solamente por lo antidemocrático del régimen y las instituciones en que se apoyan, sino sobre todo por el contenido pro capitalista de su política. Mil y uno son los lazos que unen a las camarillas universitarias con el “capitalismo nacional” de Kirchner.

… y la gestión Hallú
 Hay que dejarlo claro: el ataque de Rosito constituye la primera acción de la nueva gestión de la UBA contra el movimiento estudiantil. La propia confesión del rector Hallú del estado preocupante del presupuesto de la UBA, no hace más que confirmar la necesidad de preparar la movilización estudiantil y universitaria, ya que ninguna salida progresiva podemos esperar de la oligarquía profesoral que se arrastra frente al gobierno, al punto de pedir la protección policial y el Congreso para “sesionar”. En ese sentido, es imperioso movilizarse contra este ataque y los desafíos que vendrán.

1 La deuda reconocida por la presidencia del centro es de $230.000 anuales. En Ingeniería, a diferencia de las secretarías de publicaciones de otras facultades, donde trabajan becarios con salarios bajos, los trabajadores están en blanco y sindicalizados. Al momento de la intervención del decanato, el centro había obtenido un subsidio del Ministerio de Educación para pagar la deuda con los trabajadores.