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AMIA: Una causa todo terreno para el imperialismo

22 de marzo 2007

Finalmente INTERPOL aceptó las recomendaciones del fiscal Nisman, respaldadas por el propio Kirchner, y libró orden de captura contra cinco ex funcionarios iraníes y un dirigente libanés vinculado a Hezbollah, acusándolos de ser responsables de la masacre de la AMIA. La Casa Blanca felicitó al gobierno por cumplir los compromisos adquiridos con Bush y el poderoso Comité Judío Americano en septiembre de 2006, cuando Kirchner presidió la apertura de la bolsa de Wall Street tocando la campanita ante los magnates del capital financiero. La felicitación fue bien merecida. Si bien Lula comenzó a planificar la construcción de un muro en la Triple Frontera con el objeto de mantener a raya a la numerosa comunidad árabe residente en Ciudad del Este y Foz de Iguazú, Kirchner dobló la entrega. Pocas semanas atrás recibió a tres importantes funcionarios norteamericanos y valiéndose nuevamente de la causa AMIA resolvió adherir a la Iniciativa Global para Combatir el Terrorismo Nuclear, una iniciativa de los países imperialistas para hostigar a Irán, seguida de la presentación de un proyecto de ley antiterrorista que pone en tela de juicio las más elementales libertades públicas. Desde ya estas políticas también conspiran contra los intereses de Venezuela, asociada política y económicamente con Irán. Así Bush le dicta a Kirchner una "integración latinoamericana" a su medida, mientras sus juristas comienzan a germinar la idea de modificar la legislación internacional contenida en la Carta de la ONU para justificar una hipotética agresión contra Irán1.

Entre el encubrimiento y el fraude
El dictamen de Nisman es un auténtico fraude pues no ofrece ninguna prueba que demuestre la responsabilidad de Irán en el atentado a la AMIA. Por el contrario, sí hay sobradas pruebas que ponen en evidencia el rol del Departamento de Estado norteamericano y la Embajada del Estado de Israel como parte del encubrimiento de la causa junto al ex juez Galeano, el dirigente de la DAIA Rubén Beraja, las autoridades de la SIDE y la plana mayor del gobierno de Menem. Galeano sobornó al vendedor de autos robados Carlos Telleldín con 400.000 dólares, provistos de modo ilegal por la SIDE, para levantar falso testimonio. Pero cuando el escándalo estalló públicamente, Galeano y esta "asociación ilícita" se vieron acorralados y apuntaron a la "pista iraní", sin más prueba que las presunciones arbitrarias del FBI, la CIA y el Mosad. Desde ya, todos permanecen impunes y Galeano fue separado del caso recién en agosto de 2005, 11 años después del armado de la farsa. Nisman, un hombre del riñón de Galeano, que colaboró con el ex juez en el armado del engaño debería ser expulsado inmediatamente de su cargo.
Las acusaciones contra Irán son tan burdas que ninguna autoridad se atreve a explicar la razón por la cual INTERPOL libró orden de captura sólo contra cinco iraníes de los ocho pedidos originalmente por Nisman. Resulta que uno de ellos, el ex presidente Rafsandjani, ganó las elecciones a la Asamblea de Expertos, la institución que controla a la máxima autoridad islámica, el ayatollah Alí Jamenei. Bush apuesta a Rafsandjani como portador de "cambios en el régimen", pasando repentinamente de terrorista a fiel demócrata sin escala alguna. Otro de ellos, el ex embajador Soleimanpur, fue apresado por INTERPOL durante diciembre de 2003 en Inglaterra a pedido de Galeano, pero pocos días después fue liberarlo porque la solicitud no estaba fundamentada sobre ninguna prueba cierta, motivo por el cual encima debió abonarle una indemnización de 10.000 dólares. Vale aclarar que el dictamen de Nisman es tan trucho que se basa en la documentación elaborada por Galeano. Con razón INTERPOL especificó que "no evaluaba pruebas", sino si la orden emanaba "de un juez competente", para paso seguido aclarar que de apelar Irán el pedido de captura quedaría automáticamente sin efecto2.

Terrorismo nuclear
Kirchner se monta sobre el dolor de los familiares de las víctimas y de ese modo entrega la causa AMIA como la fachada que necesitan las potencias imperialistas para demonizar a Irán ya no sólo como terrorista sino como terrorista nuclear. En este sentido, Kirchner apoyó las disposiciones del Consejo de Seguridad de la ONU de prohibir la venta de materiales nucleares y de congelar los bienes financieros iraníes destinados a investigaciones atómicas. Desde ya que el programa iraní de enriquecimiento de uranio es prácticamente inexistente en relación a la capacidad atómica y al potencial destructivo que poseen los países imperialistas. El poderío militar de EE.UU. es tan mortífero que se encuentra dotado para destruir el planeta aproximadamente 500 veces. Sólo en suelo europeo, EE.UU. tiene 500 ojivas nucleares, seguidos de Francia e Inglaterra que acaparan 400 y 350 cabezas nucleares respectivamente, mientras el Estado de Israel conserva más de 500 bombas atómicas en sus arsenales. 39 años después de establecido el Tratado de No Proliferación Nuclear, estos países incrementaron geométricamente sus depósitos armamentísticos, en tanto empuñan la letra del tratado para exhortar la censura sobre los países oprimidos . Los socialistas revolucionarios del PTS defendemos a Irán como Estado soberano y reconocemos su derecho ya sea para producir energía o ya sea para proveerse de armamento nuclear en función de ejercer su legítima defensa ante cualquier agresión imperialista.

Apertura de los archivos secretos
Mientras los gobiernos de Menem y De la Rúa mantuvieron la impunidad de la causa AMIA bajo el manto del encubrimiento, el gobierno de Kirchner los superó con creces promoviendo nuevas leyes como mascarón de proa de las necesidades imperialistas. Después de 13 años de impunidad la experiencia señala que es necesario abordar otro camino. Tal como declaran los compañeros de APEMIA (Agrupación por el Esclarecimiento de la Masacre Impune de la AMIA), la única forma de conocer toda la verdad y castigar a los culpables del atentado es imponer la apertura de los archivos secretos y de toda la documentación de los servicios de inteligencia, poniéndola en manos de una comisión investigadora independiente integrada por familiares, organismos de derechos humanos y organizaciones obreras combativas. Sólo apelando a la movilización obrera y popular independiente del Estado será posible orientarse hacia este curso.

1 Clarín, 20/03/07.
2 Página/12, 15/03/07.

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