El abrazo del MST al frente campero terminó en una alianza estratégica, sindical y política con Pino Solanas (y con el que venga, sean Binner o el GEN) para llegar al 2011. Más allá de la confirmación para algún incauto de que el MST no es más de izquierda, hay que reconocer su “flexibilidad táctica”. En el Subte participaron de la conferencia de prensa con sus dirigentes Guillermo Pacagnini y Vilma Ripoll para apoyar a Pianelli y Segovia que están con la lista “10”. Por su parte, el MST, que es parte de la lista 1 de Micheli se sumó a la campaña de la 10 en el Subte al mismo tiempo que presentaba la boleta de la 1 sacando 14 votos. Igual política tuvo Libres del Sur.

Lo único que está claro es que el MST, hoy pata izquierda de la oposición patronal al gobierno, puede llegar hasta apoyar a Yasky pero siempre estará enfrentado al sindicalismo de base y a las mejores tradiciones de lucha del movimiento obrero. No es la primera vez: ya apoyó a la lista del PCR-CCC en Kraft, que había firmado la paz social que dejaba decenas de activistas en la calle.

C.D.