Un tucumano peleará el 28 de octubre para ser Presidente

Cuenta orgulloso que su pasión futbolera no es ni Boca Juniors ni River Plate, sino por el club Estación Experimental.  “Cuando me preguntan de quién soy hincha digo que de ‘las avispas’; pero tengo que explicar de qué club hablo porque nadie lo conoce”, afirma entre risas José Montes, el candidato a Presidente del Frente de Izquierda y de los Trabajadores Socialistas. Ni la comunicación telefónica ni el tiempo que lleva radicado en Buenos Aires pueden disimular la característica tonada tucumana. “Es que voy cada vez que puedo; ahí están mi viejo, mis tíos y muchos amigos”, relata, durante su diálogo con LA GACETA.
Montes ya cumplió 57 años y más de 35 de desarraigo provincial. A los 18 años armó su valija y dejó la tranquila vida en El Colmenar para probar suerte en Buenos Aires. “Como todos los de mi generación, me crié en el club por una tradición familiar y barrial. Hasta tengo el orgullo de haber formado parte del histórico equipo que le dio a Estación Experimental, en 1968, el ascenso a la Primera de la Liga Tucumana de Fútbol. Jugaba en la reserva, pero a veces iba al banco de suplentes”, recuerda.

Pasado en busca de futuro
Hoy, Montes vive en el partido de Berisso está casado en segundas nupcias y tiene cuatro hijos y dos nietos.
Toda su vida familiar, política y laboral la forjó en Buenos Aires. Tanto, que desde hace 24 años trabaja en Astilleros Río Santiago, de Ensenada. Pero nada de eso le quita la nostalgia por Tucumán. Y es el único de los 13 postulantes a la Presidencia que nació en el norte argentino.
“Como la mayoría de los jóvenes de esa época, me vine a la Capital en busca de un futuro. Si bien crecí dentro de una familia peronista y de dirigentes sindicales, en Tucumán nunca milité. En Buenos Aires inicié mi actividad sindical y política”, explica.
Lo lógico, según él mismo lo reconoce, hubiese sido una inclinación por el peronismo, a partir de la influencia familiar. Sin embargo, se dejó seducir por las ideas de izquierda que, en los 70, comenzaban a atraer a miles de jóvenes.
“Las ideas peronistas no congeniaban con mi manera de entender la política después me volqué decididamente al trotskismo”, remarca.
Con el retorno de la democracia comenzó a militar en el Movimiento Al Socialismo (MAS) hasta su disolución, en 1988. En esa época ya trabajaba en el astillero y se había convertido en delegado gremial.
“Encabecé la lucha contra la privatización durante la década menemista”, relata el hombre que hoy integra el Partido de los Trabajadores Socialistas y forma una línea opositora en la Asociación de Trabajadores del Estado.

Contrastes del presente
El tucumano asegura que se presenta por segunda vez como candidato a Presidente (ya lo hizo en 1999) para que la gente conozca las ideas de su partido. “Cristina Kirchner ganará, pero será la mera continuidad de la política económica aplicada por su marido. Es una abanderada de los empresarios, de los mismos que se beneficiaron en los 90”, objeta.
Montes critica el modelo de dólar alto y asegura que menos de un 20% de los trabajadores recuperó parte de los salarios tras la devaluación del peso. “Es inconcebible que, a pesar de la bonanza económica, no podamos acceder a una canasta familiar básica. Los trabajadores somos convidados de piedra, mientras los viejos burócratas sindicales, los empresarios y los gobernantes se llevan la plata del país”, se queja.
¿Se puede competir contra la estructura oficialista?, se le pregunta. “Desgraciadamente, el terreno electoral es el más desfavorable para la clase trabajadora. Sigue primando el clientelismo. Los trabajadores somos los que hacemos funcionar el país, pero esa gran mayoría que somos no se traduce en la vida política. Ese es el desafío, crear un gran partido de los trabajadores”, responde, antes de prometer que visitará la provincia días antes de las elecciones.