Este miércoles 1/8 se dictó la conciliación obligatoria en el conflicto de los marineros de Puerto Deseado. Las patronales pesqueras no quieren ceder en sus millonarias ganancias. Los trabajadores no aflojan. En esta nota, una de las razones que los mantiene firmes: la compañera de uno de los trabajadores nos cuenta cómo se vive, cómo se trabaja y cómo se lucha en las costas de Santa Cruz.

La comisión de mujeres surge por todo lo sucedido en Puerto Deseado, por la impotencia ante los empresarios, por casi 20 días de estar en un piquete y no recibir respuesta.

Los marineros se sintieron muy acompañados por las mujeres, por la familia. Participábamos de los piquetes, en los medios de comunicación. Una radio oficialista no nos dejó hablar, es la radio que maneja la municipalidad de Puerto Deseado.

En la primera línea

Las mujeres demostramos nuestras emociones. Los hombres son más callados y lo demuestran con una acción, pero nosotras que somos las que hablamos y vamos al negocio día a día somos las que tenemos que pelearnos y explicar cuando dicen “¡Cuánto gana el marinero!”, “¡De qué se queja el marinero!” y tenés que saber lo que vive el marinero y lo que las empresas ganan, lo que le tienen que pagar al marinero.

Depredación y migajas

Lo que más quiero yo es que haya un antes y un después en Puerto Deseado después de todo esto. Porque si el empresario gana, tiene que ganar el marinero, y hoy el empresario le da migajas.

Sin la pesca Puerto Deseado no existe. Además depredan. Las empresas salieron con gente no especializada y se vuelven a tirar una parte al mar. Todos los años se viene depredando aunque lleven inspectores en sus barcos.

Compañeras

Mi marido hace 7 años que navega y no es efectivo. Comienza el conflicto el 3 de julio y ellos estaban navegando. Y la empresa lo lleva a otro puerto en vez de traer el barco a Puerto Deseado. Sin ser efectivo se baja para apoyar a sus compañeros. Y yo lo apoyo totalmente, porque está peleando por la dignidad de él, de la familia y de todos.

Porque aparte de toda la presión que tienen de las empresas, de no cobrar lo que corresponde.¡Encima que tenga la presión de su mujer!

La violencia de ellos

Cuando alguien me dice “yo estoy de acuerdo con la medida, pero no estoy de acuerdo con la forma en que se hizo”, cuando me hablan de violencia por lo que hicieron los marineros, yo les digo que también es violencia lo que vienen haciendo los empresarios hace mucho tiempo, los políticos.

Los “ex”delegados que expulsó el SOMU central, nuestros representantes, son marineros. Ellos saben lo que pierde el hombre de mar; es como estar adentro de una cárcel, trabajando 20 hs por día o más, no viendo a la familia, a los hijos crecer y encima llegar y tener que hacer una denuncia al Ministerio de trabajo para poder cobrar un sueldo, porque algunas empresas no le quieren pagar.

Entrevistó Malvina Vera